República Centroafricana frente a la escasez aguda de alimentos

VOA - INGLÉS
Un nuevo informe encuentra que casi la mitad de todas las personas en la República Centroafricana están sufriendo una escasez aguda de alimentos. La última evaluación realizada por la Clasificación Integrada de la Fase de Seguridad Alimentaria, un esfuerzo conjunto de ocho organizaciones no gubernamentales de Estados Unidos e internacionales, encuentra más de 1.8 millones de personas en C.A.R. Se enfrentan a una crisis alimentaria de emergencia.


La guerra civil en la República Centroafricana estalló en diciembre de 2013 y continúa afectando a su gente. El país se encuentra en medio de la llamada temporada de escasez, que va de mayo a agosto.

Este es el período entre cosechas en que las personas han agotado sus reservas de alimentos y el hambre es particularmente grave. El Programa Mundial de Alimentos informa que casi 2 millones de personas no saben de dónde vendrá su próxima comida durante este período.

El portavoz del PMA, Herve Verhoosel, dice que, lamentablemente, la crisis del hambre no terminará cuando la temporada de escasez llegue a su fin.

"Casi 1,35 millones de personas, casi el 30 por ciento de la población analizada, sufrirán una grave inseguridad alimentaria aguda, incluidas casi 275,000 personas en situaciones de emergencia durante el período de recolección, es decir, septiembre y octubre", dice Verhoosel.

Las Naciones Unidas informan que más de medio millón de refugiados han huido a países vecinos para escapar de los estragos de la guerra. Cerca de 700,000 personas permanecen desplazadas dentro de la C.A.R.

La firma de un acuerdo de paz en la capital, Bangui, en febrero dio origen a esperanzas de que la crisis en el país pronto terminaría. Sin embargo, las condiciones de seguridad siguen siendo inestables y los ataques continúan con una mayor ferocidad en varias partes del país donde los grupos armados que no firmaron el acuerdo tienen el control.

La inseguridad continua está obstaculizando las operaciones humanitarias y dificultando, si no imposible, proporcionar alimentos y otra ayuda crucial a los civiles atrapados en medio de esta violencia.

El Programa Mundial de Alimentos ayuda a unas 600,000 personas en el país cada mes. Verhoosel dice que el PMA y sus socios están tratando de llegar a más personas que necesitan ayuda con urgencia.

Él dice que los desplazados internos y los refugiados son los más vulnerables. Él dice que dependen totalmente de la asistencia internacional para satisfacer sus necesidades alimenticias y nutricionales.