Líderes de Pakistán y Afganistán sostienen conversaciones raras

VOA - INGLÉS
El primer ministro pakistaní, Imran Khan, y el presidente afgano, Ashraf Ghani, sostuvieron sus primeras conversaciones cara a cara el viernes, al margen de una cumbre anual de países islámicos en Arabia Saudita.


La rara interacción en el nivel más alto es el último signo de alivio de las tensiones en las relaciones tradicionalmente ásperas entre los vecinos.

La animosidad se deriva de acusaciones mutuas de apoyo a los ataques militantes entre sí.

Un portavoz de la presidencia afgana dijo que la reunión en la ciudad saudita de Makkah fue un preludio a la visita oficial de Ghani a Islamabad programada para el próximo mes. El líder afgano ha visitado Pakistán anteriormente, pero el próximo viaje será el primero desde que Khan asumió el cargo en agosto pasado.

"Afganistán está listo para dejar atrás su amarga historia con Pakistán, y avanzar hacia lazos constructivos de estado a estado basados ​​en el respeto mutuo en lugar de la recriminación y la hostilidad", escribió el portavoz Samim Arif.

Una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Pakistán dijo que tanto Khan como Ghani estuvieron de acuerdo en la necesidad de trabajar estrechamente para intensificar la cooperación en temas como energía, seguridad, comercio y colaboración cultural.

El primer ministro, dijo, reafirmó el compromiso de Pakistán con un Afganistán pacífico y estable. "Reiteró la creencia de que un proceso de paz liderado por afganos y de propiedad afgana era indispensable para una solución política", agrega la declaración.

A principios de esta semana, el asesor de seguridad nacional afgano, Hamadullah Mohib, visitó Pakistán, donde sostuvo extensas conversaciones con el jefe militar del país, el general Qamar Javed Bajwa, sobre asuntos de seguridad bilateral y paz en Afganistán.

Los funcionarios afganos habitualmente alegan que los líderes y combatientes de los talibanes usan santuarios en territorio pakistaní para organizar actividades insurgentes dentro de Afganistán.

Islamabad rechaza los cargos y, a su vez, acusa a Kabul de proporcionar refugio y apoyo a los militantes antipatales que planean ataques transfronterizos en Pakistán.

Los funcionarios pakistaníes se acreditan por organizar las negociaciones en curso entre los Estados Unidos y los talibanes para ayudar a promover un acuerdo negociado para la mortal guerra afgana.

El diálogo de un mes, sin embargo, no ha ofrecido ningún avance importante.

El Talibán quiere un retiro completo de las fuerzas extranjeras lideradas por los Estados Unidos de Afganistán antes de que deje de luchar y se involucre en las conversaciones de paz intra afganas.

Washington insiste en que un acuerdo final debe cubrir no solo un calendario de retiro de tropas, sino también un alto el fuego por parte de los talibanes y su participación en las conversaciones con el gobierno de Kabul.