Jefa de clima de la ONU elogia los movimientos de protesta
Bonn (Alemania), 16 jun (dpa) - La secretaria ejecutiva de la Convención Marco de Naciones Unidas (ONU) sobre Cambio Climático, Patricia Espinosa, expresó su comprensión por el movimiento de protesta estudiantil "Fridays for Future", un día antes del comienzo de una nueva conferencia climática en Bonn.
"Damos la bienvenida a estas voces inspiradoras como parte de nuestros esfuerzos para limitar el aumento de la temperatura mundial a 1,5 grados", indicó a dpa la exministra mexicana de Relaciones Exteriores.
No se debe olvidar nunca que son los jóvenes los que pueden cambiar el mundo. Es lo que justamente ahora están haciendo, señaló.
La reunión de diez días comienza el lunes en Bonn y contará con la participación de 3.000 expertos de todo el mundo.
Espinosa agregó que el cambio climático sigue siendo el mayor desafío para esta generación y las venideras y que hay pruebas abrumadoras de la urgencia de la situación.
"Los jóvenes de todo el mundo lo saben y están enfadados", indicó. Ellos exigen que se tomen medidas ahora, agregó.
La reunión de Bonn, en el oeste de Alemania, preparará la próxima cumbre mundial sobre el clima de la ONU que se celebrará en Santiago de Chile en diciembre.
Los compromisos de todos los países del mundo aún no son suficientes para alcanzar el objetivo del Acuerdo de Protección del Clima de París, que consiste en limitar el calentamiento global a un mínimo de 1,5 grados centígrados.
Según las conclusiones del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), el planeta ya se ha calentado alrededor de un grado centígrado en comparación con la época preindustrial.
Si todo continúa así, es probable la temperatura se incremente en tres grados a finales de este siglo.
Las consecuencias fatales del aumento global de temperatura incluirán, según la región, un mayor número de olas de calor, de sequías prolongadas, tormentas, fuertes lluvias e inundaciones.
El año pasado, también las emisiones de dióxido de carbono, que también producen el efecto invernadero, aumentaron en lugar de disminuir.
El Gobierno alemán discute actualmente la forma de reducir las emisiones en la producción energética, el transporte, la industria, los edificios y otros sectores.
Dado que Alemania no sólo no cumple con sus propios objetivos, sino que tampoco con los de la Unión Europea, existe el riesgo de que se le impongan costosas sanciones.
"Damos la bienvenida a estas voces inspiradoras como parte de nuestros esfuerzos para limitar el aumento de la temperatura mundial a 1,5 grados", indicó a dpa la exministra mexicana de Relaciones Exteriores.
No se debe olvidar nunca que son los jóvenes los que pueden cambiar el mundo. Es lo que justamente ahora están haciendo, señaló.
La reunión de diez días comienza el lunes en Bonn y contará con la participación de 3.000 expertos de todo el mundo.
Espinosa agregó que el cambio climático sigue siendo el mayor desafío para esta generación y las venideras y que hay pruebas abrumadoras de la urgencia de la situación.
"Los jóvenes de todo el mundo lo saben y están enfadados", indicó. Ellos exigen que se tomen medidas ahora, agregó.
La reunión de Bonn, en el oeste de Alemania, preparará la próxima cumbre mundial sobre el clima de la ONU que se celebrará en Santiago de Chile en diciembre.
Los compromisos de todos los países del mundo aún no son suficientes para alcanzar el objetivo del Acuerdo de Protección del Clima de París, que consiste en limitar el calentamiento global a un mínimo de 1,5 grados centígrados.
Según las conclusiones del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), el planeta ya se ha calentado alrededor de un grado centígrado en comparación con la época preindustrial.
Si todo continúa así, es probable la temperatura se incremente en tres grados a finales de este siglo.
Las consecuencias fatales del aumento global de temperatura incluirán, según la región, un mayor número de olas de calor, de sequías prolongadas, tormentas, fuertes lluvias e inundaciones.
El año pasado, también las emisiones de dióxido de carbono, que también producen el efecto invernadero, aumentaron en lugar de disminuir.
El Gobierno alemán discute actualmente la forma de reducir las emisiones en la producción energética, el transporte, la industria, los edificios y otros sectores.
Dado que Alemania no sólo no cumple con sus propios objetivos, sino que tampoco con los de la Unión Europea, existe el riesgo de que se le impongan costosas sanciones.
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