Cuba vota sobre constitución actualizada, acepta propiedad privada

VOA - INGLÉS

Los cubanos votaron el domingo una nueva constitución que amplía el reconocimiento de la propiedad privada y actualiza una carta de la era del bloque soviético para la nación socialista.


El nuevo documento, que se había modificado después de una serie de consultas públicas, mantiene el control del Partido Comunista, pero ajusta el sistema legal de la nación para dar cuenta de años de mayor apertura a la pequeña empresa privada y vínculos más estrechos con los emigrantes cubanos en el extranjero.

Se aseguró la aprobación de la medida, a pesar de la oposición de algunos líderes cristianos evangélicos que están molestos porque el documento abre la posibilidad de una eventual legalización del matrimonio gay.

Las líneas se extendieron desde las escuelas que se utilizaron como lugares de votación el domingo después de días de fuerte promoción oficial para un voto de "Sí" y un sentimiento de oposición menos prominente expresado en sitios de redes sociales recientemente abiertos a una gama más amplia de cubanos.

El presidente Miguel Díaz-Canel llevó a Twitter para alentar el apoyo, escribiendo "CubaVotesYes" y diciendo que el documento "garantiza los derechos de todos y cada uno de los ciudadanos de la nación".

La constitución anterior fue adoptada en 1976 en un momento en que Cuba dependía en gran medida de la ayuda y el comercio soviéticos y de la empresa privada estrechamente restringida. Desde que el colapso de la Unión Soviética golpeó la economía de Cuba a principios de la década de 1990, la isla ha permitido a cientos de miles de personas lanzar pequeñas empresas privadas, aunque su escala ha sido muy restringida. La nueva constitución permitiría que algunas de estas empresas contraten legalmente a unos pocos trabajadores.

Las consultas en toda la isla llevaron a numerosos cambios en el documento, en particular omitiendo un artículo que legalizaría el matrimonio gay. Pero los evangélicos se alarmaron de que parece abrir el camino para una eventual legalización al omitir la definición de matrimonio entre un hombre y una mujer.

El documento también crearía el puesto de primer ministro, promovería las cooperativas y reconocería la doble ciudadanía.