Muchos alemanes buscan formarse con "Última Generación" para protestar



Berlín, 27 may (dpa) - Las redadas policiales contra miembros del movimiento climático "Letzte Generation" (Última Generación) provocaron una avalancha de inscripciones para los cursos de formación sobre sus acciones de protesta, informó hoy el grupo activista.


"Innumerables personas se inscribieron en las sesiones de formación para las sentadas de bloqueo de la próxima semana", decía una carta abierta de los activistas, publicada hoy y dirigida al canciller alemán, Olaf Scholz.


"Deseamos que nuestra protesta deje de ser necesaria. Que su Gobierno actúe constitucionalmente. Que toda la gente nueva que acaba de llegar a la Última Generación ya no considere necesario hacer sentadas de bloqueo", escribió el grupo.


El movimiento anunció el viernes que por el momento se centraría en manifestaciones en lugar de bloqueos callejeros. Para el miércoles, llamó a participar en marchas de protesta en todo el país.


Al mismo tiempo, Última Generación anunció el fin de sus protestas en cuanto el Gobierno alemán convoque el llamado consejo social para planificar el fin del uso de combustibles fósiles en Alemania para 2030, una de las principales reivindicaciones del grupo.


Desde principios de 2022 el movimiento de protesta climática ha bloqueado repetidamente las principales calles de numerosas ciudades. Con sus protestas, quiere denunciar los déficits de la política climática, por ejemplo en lo que respecta a las inmensas emisiones perjudiciales para el clima que produce el tráfico de automóviles.


La Policía y la Fiscalía efectuaron el miércoles una redada masiva dirigida contra miembros de Última Generación. Unos 170 agentes registraron 15 pisos y locales comerciales en siete Estados federados, según la Fiscalía de Múnich y la Oficina Estatal de Policía Criminal de Baviera.


La acusación contra los integrantes de Última Generación es de formar parte de o apoyar a una organización criminal. Los activistas niegan ser delincuentes, aunque varios ya han sido condenados por delitos penales, algunos incluso a penas de prisión. La redada fue criticada desde muchas posiciones por considerarla excesiva.