TC alemán clasifica dispositivos de manipulación diésel como defecto

Por Anja Semmelroch (dpa)
Karlsruhe (Alemania), 22 feb (dpa) - Los dispositivos ilegales para manipular el nivel de emisiones contaminantes incorporados en múltiples marcas de automóviles diésel pueden considerarse un defecto, dictaminó hoy el Tribunal Constitucional (TC) alemán en Karlsruhe.


Varios fabricantes alemanes de automotores se han visto afectados por el creciente escándalo de las manipulaciones de los motores diésel en la industria desde que salió a la luz en 2015 que Volkswagen diseñó autos con dispositivos de desactivación que permitían que sus emisiones no superaran las normativas medioambientales en las pruebas, incluso si los niveles eran mucho más altos en la realidad.

El escándalo provocó juicios y consecuencias políticas para las empresas, pero también sacudió a los consumidores alemanes, muchos de los cuales estaban convencidos de que los autos diésel eran una buena compra. Ahora, en cambio, descubrieron que conducir sus vehículos es ilegal en algunas partes del país.

El fallo "es una muy buena noticia" para los consumidores, dijo la Oficina Central del Consumidor en Alemania (VZBV), que prepara una demanda colectiva contra fabricantes de automóviles como el gigante automovilístico germano Volkswagen (VW).

El presidente de la VZBV, Klaus Müller, señaló que la decisión pone de manifiesto que la instalación de los dispositivos, diseñados para sortear las pruebas de emisiones, fue ilegal.

Según una declaración del tribunal, se estaba preparando para emitir una resolución el próximo miércoles en el caso de un propietario de un auto que demandara a la compañía porque el automóvil había perdido valor gracias debido al dispositivo de desactivación. Sin embargo, las partes llegaron a un acuerdo fuera de los tribunales.

No obstante, el Tribunal Constitucional decidió publicar su fallo de todos modos, señalando que equipar un automóvil con un dispositivo para manipular en las pruebas podría considerarse defectuoso.

"Existe el peligro de que las autoridades prohíban que el automóvil esté en las calles, lo que haría que el artículo sea inutilizable para su propósito previsto: conducirlo en el tráfico", escribió el tribunal.

También cuestionó la decisión del tribunal inferior que había llamado la atención sobre el caso en cuestión. Allí se dictaminó que el demandante no podía obtener un automóvil de reemplazo porque el modelo en cuestión ya no se producía, como había argumentado Volkswagen.

Pero el Constitucional dijo hoy que esta decisión ignoró la opción de que el demandante podría haber recibido un auto de reemplazo de una línea de modelo más reciente, sin que eso supusiera una presión significativa para la compañía.

El TC también manifestó que quiere dar a conocer una lista de hechos y argumentos relacionados con el caso "pronto".

A pesar de la decisión de este viernes, el fabricante de automóviles alemán Volkswagen señaló que los esfuerzos por iniciar una demanda colectiva por parte de los clientes tampoco funcionará.

Volkswagen estimó que los datos que el tribunal divulgó son preliminares y que la opinión emitida hoy no se trató técnicamente de una decisión, ya que el caso en cuestión había sido retirado antes de que el tribunal pudiera actuar.

Cientos de miles de conductores de vehículos diésel en Alemania se unieron a una demanda colectiva contra el gigante automovilístico germano Volkswagen por el escándalo de manipulación de vehículos diésel.

La VZBV anunció a principios de este mes que más de 400.000 propietarios de autos diésel se registraron en la demanda conjunta contra Volkswagen.

Según Volkswagen, hay cerca de 50.000 juicios pendientes en contra del fabricante de automóviles o sus empresas afiliadas, con cerca de 14.000 ya resueltos, muchos de ellos a favor de la compañía.

Los clientes agraviados tratan de interponer una demanda colectiva, lo que sería una novedad para Alemania. El caso de Volkswagen ha sido el de más alto perfil, en parte porque sus esfuerzos por eludir las reglas fueron los primeros en descubrirse.

Sin embargo, varios otros fabricantes de automóviles alemanes también están experimentando problemas legales debido a los esfuerzos para hacer que los automóviles diésel parezcan en regla.