Centrales energéticas lastran el balance trimestral de Siemens

Múnich, 8 nov (dpa) - La división de centrales energéticas de Siemens sigue siendo el principal problema del gigante alemán, que registró una caída de los beneficios de casi la mitad en el cuarto trimestre del año en comparación con el año anterior, según datos publicados hoy.


El exceso de capacidad de las turbinas de gas y la tendencia hacia las energías renovables perjudica en gran medida a toda la industria, lo que ha llevado a Siemens a tener que reducir miles de puestos de trabajo.

La conversión cuesta dinero y provocó una caída de los beneficios. Siemens ganó 681 millones de euros (777,6 millones de dólares) en los últimos tres meses del pasado ejercicio, frente a los 1.250 millones de euros del mismo período del año pasado, anunció la compañía.

La reestructuración de la división Power & Gas (PG) supuso para Siemens una carga de 301 millones de euros en el cuarto trimestre. De este modo, una gran parte de los costes de la reducción de personal en Alemania se han liquidado, informó la empresa.

"Desde el principios nos dimos cuenta de la necesidad de actuar en la división PG", declaró el director financiero Ralf Thomas durante la presentación de las cifras de negocio. "Hemos iniciado medidas para eliminar 500 millones de euros en costes en todo el mundo", agregó.

El exceso de capacidad está afectando a toda la industria. Por esta razón, el competidor estadounidense General Electric lleva en caída libre durante meses.

El conglomerado con sede en Múnich, que actualmente está en pleno cambio, también fue muy sólido en el pasado ejercicio de negocio que acaba de terminar. Con 83.040 millones de euros, las ventas del conjunto del año 2018 fueron ligeramente superiores a las del año anterior. El beneficio después de impuestos aumentó en 26 millones de euros, hasta los 6.120 millones de euros.

"Hemos vuelto a cumplir lo que prometimos y hemos alcanzado plenamente nuestras previsiones para el año, que se habían elevado a mitad de año", dijo el presidente de Siemens, Joe Kaeser.

El grupo también espera un ligero crecimiento de las ventas en el próximo ejercicio. En todas las áreas de negocio, con la excepción de la división de centrales energéticas, se espera que el crecimiento sea muy superior al de la competencia, indicaron fuentes de la empresa en el marco de la presentación.

El negocio ferroviario, que en el futuro se fusionará con el competidor francés Alstom -aunque aún debe recibir el visto bueno de la Comisión de la Unión Europea-, sigue siendo uno de sus buques insignia. Gracias en parte a un importante pedido de los ferrocarriles alemanes de alrededor de 600 millones de euros, el resultado en el cuarto trimestre subió un 23 por ciento, hasta los 236 millones de euros. "Con 2.300 millones de euros, Mobility alcanzó un récord de ventas el año pasado", dijo Thomas.

Kaeser también indicó que Siemens está avanzando a buen ritmo en la reestructuración de toda la empresa. En la actualidad, la empresa se está convirtiendo cada vez más en un holding con tres unidades operativas, que van a ser más independientes y a asumir más responsabilidades.