Tumbas cristianas profanadas en el centro de Israel
VOA
Los vándalos han derribado cruces de hormigón que marcan docenas de tumbas en un cementerio cristiano en el centro de Israel, dijo el jueves un funcionario de la iglesia.
El padre Antonio Scodo, responsable del mantenimiento del cementerio de la iglesia de San Esteban, dentro del monasterio de Beit Jamal, dijo que el daño fue visto por las monjas en un convento contiguo el miércoles.
"Pero los hechos seguramente se remontan más", dijo a la AFP.
Dijo que el abuso de 26 tumbas fue un acto de profanación en lugar de vandalismo aleatorio.
"Querían romper, derribar, un símbolo de los cristianos, la cruz".
"Muchos, muchos israelíes vienen aquí y están felices, vienen con sus familias porque saben que hay un lugar hermoso y tranquilo", dijo.
"Así que no sabemos por qué ellos [los atacantes] están en contra de estos símbolos de nuestra religión: la cruz".
El portavoz de la policía israelí Mickey Rosenfeld dijo que el ataque pudo haberse llevado a cabo hace "varias semanas".
Dijo que se había abierto una investigación pero que hasta ahora la policía no tenía sospechosos.
No fue el primer acto de este tipo en el monasterio católico romano, cerca de la ciudad israelí de Beit Shemesh, al oeste de Jerusalén.
Las cruces en el cementerio de Beit Jamal se dañaron en 2016 y en 1981. La iglesia fue atacada el año pasado.
"Somos objeto de mucho odio", dijo Scodo. "Y no molestamos a nadie aquí, estamos aquí por más de 100 años".
Cerca de Beit Shemesh se encuentra una gran población de judíos ultraortodoxos que en el pasado se enfrentaron con residentes judíos menos observadores.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel calificó el último incidente de "despreciable".
"Condenamos enérgicamente e inequívocamente este acto de odio contra la comunidad cristiana", escribió el portavoz Emmanuel Nahshon.
"Israel está comprometido a combatir cualquier forma de odio e intolerancia contra todas las religiones".
Wadie Abunassar, un asesor de la Iglesia Católica en Tierra Santa, dijo que el historial de Israel en la captura de perpetradores pasados no inspiró confianza.
"No lograron llevar a nadie ante la justicia por estos actos, y nos preguntamos si ese será el caso de nuevo", escribió en una declaración.
Los vándalos han derribado cruces de hormigón que marcan docenas de tumbas en un cementerio cristiano en el centro de Israel, dijo el jueves un funcionario de la iglesia.
El padre Antonio Scodo, responsable del mantenimiento del cementerio de la iglesia de San Esteban, dentro del monasterio de Beit Jamal, dijo que el daño fue visto por las monjas en un convento contiguo el miércoles.
"Pero los hechos seguramente se remontan más", dijo a la AFP.
Dijo que el abuso de 26 tumbas fue un acto de profanación en lugar de vandalismo aleatorio.
"Querían romper, derribar, un símbolo de los cristianos, la cruz".
"Muchos, muchos israelíes vienen aquí y están felices, vienen con sus familias porque saben que hay un lugar hermoso y tranquilo", dijo.
"Así que no sabemos por qué ellos [los atacantes] están en contra de estos símbolos de nuestra religión: la cruz".
El portavoz de la policía israelí Mickey Rosenfeld dijo que el ataque pudo haberse llevado a cabo hace "varias semanas".
Dijo que se había abierto una investigación pero que hasta ahora la policía no tenía sospechosos.
No fue el primer acto de este tipo en el monasterio católico romano, cerca de la ciudad israelí de Beit Shemesh, al oeste de Jerusalén.
Las cruces en el cementerio de Beit Jamal se dañaron en 2016 y en 1981. La iglesia fue atacada el año pasado.
"Somos objeto de mucho odio", dijo Scodo. "Y no molestamos a nadie aquí, estamos aquí por más de 100 años".
Cerca de Beit Shemesh se encuentra una gran población de judíos ultraortodoxos que en el pasado se enfrentaron con residentes judíos menos observadores.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel calificó el último incidente de "despreciable".
"Condenamos enérgicamente e inequívocamente este acto de odio contra la comunidad cristiana", escribió el portavoz Emmanuel Nahshon.
"Israel está comprometido a combatir cualquier forma de odio e intolerancia contra todas las religiones".
Wadie Abunassar, un asesor de la Iglesia Católica en Tierra Santa, dijo que el historial de Israel en la captura de perpetradores pasados no inspiró confianza.
"No lograron llevar a nadie ante la justicia por estos actos, y nos preguntamos si ese será el caso de nuevo", escribió en una declaración.
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