Comienza en Alemania juicio a presidente banco alemán rescatado HRE

Múnich, 20 mar (dpa) - En la ciudad de Múnich comenzó hoy el juicio a dos directivos del banco Hypo Real Estate (HRE), el banco hipotecario que en 2008 quedó al borde de la quiebra en plena crisis financiera mundial y tuvo que ser rescatado con sumas astronómicas por el Estado alemán.

Georg Funke, entonces presidente del instituto, y el responsable de las finanzas Markus Fell, se sientan en el banquillo de los acusados por haber maquillado presuntamente los balances en el cénit de la crisis financiera (2007/2008) para ocultar la verdadera situación del banco a accionistas e inversores. Ambos rechazan los cargos.

Funke podría ser condenado a hasta tres años de cárcel, mientras Fell enfrenta además el cargo de presunta manipulación de mercado, castigado con una pena máxima de cinco años de cárcel.

El banco hipotecario Hypo Real Estate (HRE), entonces el tercer banco alemán por volumen de negocios detrás del Deutsche Bank y del Commerzbank, entró en turbulencias en 2008 a consecuencia de la quiebra del banco norteamericano Lehman Brothers.

Para evitar un efecto dominó en Alemania que hubiera causado estragos en todo el sistema bancario alemán, el Gobierno germano salió al rescate con una inyección de 10.000 millones de euros (10.700 millones de dólares) y avales por otros 124.000 millones.

El temor a un descalabro generalizado obligó a la canciller alemana, Angela Merkel, y a su entonces ministro de Finanzas, Peer Steinbrück, a asegurar públicamente a los alemanes: "Sus depósitos están seguros".

El HRE fue nacionalizado en 2009 y los activos tóxicos fueron asumidos por un "banco malo" estatal. Según datos del Ministerio alemán de Finanzas, las deudas pendientes suman 183.000 millones de euros.

La adquisición en 2007, medio año antes del estallido de la crisis, del banco hipotecario Depfa, con sede en Irlanda, por más de 5.000 millones de euros, precipitó la crisis del HRE.

Poco después resultó que el momento de la operación había sido el menos oportuno. Los problemas salieron a la luz a principios de 2008 y los títulos del HRE se desplomaron.

El banco Depfa otorgaba créditos a largo plazo a inversores inmobiliarios y se proveía al mismo tiempo de capital fresco a través de préstamos a corto plazo.

En septiembre de 2008, tras la bancarrota de Lehman Brothers en Nueva York, el mercado interbancario se paralizó y el HRE no consiguió más dinero para cubrirse.

Funke se considera una víctima y demanda el pago de la jubilación estipulada en su contrato de 47.000 euros mensuales. El banquero se mudó inmediatamente después de ser despedido a Mallorca, donde trabajó un tiempo como agente inmobiliario y ahora está nuevamente instalado en Alemania.

La Fiscalía tardó ocho años en elaborar la acusación. La sospecha inicial por malversación de fondos que pesaba sobre Funke no se confirmó. Los cargos contra otros seis miembros de la junta directiva del banco fueron retirados a cambio del pago de multas de entre 30.000 y 80.000 euros.