Bayern tiene ventaja de 5-1, pero Ancelotti no se fía por experiencia

Por Klaus Bergmann (dpa)

Londres, 7 mar (dpa) - ¿Viaje de empresa? ¿Visita de placer? ¿Partido amistoso? No, el Bayern Múnich no quería oír nada de eso antes de su viaje a Londres para jugar con el Arsenal la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones de fútbol, pese a que cuenta con una ventaja de 5-1.

Y el principal motivo para eso es la experiencia vital de su entrenador, Carlo Ancelotti, presente en el banquillo perdedor de algunas de las remontadas más inesperadas de la historia de la Champions League.

"Esto no es una excursión, sino la Liga de Campeones. La puerta está abierta, pero ahora tenemos que jugar con seriedad y respeto", advirtió el jefe de la junta directiva, Karl-Heinz Rummenigge, antes de subir al avión que lo llevaría de Múnich a Londres.

El equipo inglés, dirigido por un cada vez más criticado Arsene Wenger, no parece suponer en la situación actual una seria amenaza para el Bayern.

El técnico francés aseguró además que no cree que el alemán Mesut Özil, ausente ya por enfermedad en la derrota por 3-1 del sábado ante el Liverpool, se recupere a tiempo para el partido. "No es una situación ideal, pero vamos a darnos a nosotros mismos una oportunidad", dijo no obstante Wenger.

Ancelotti solo necesita mirar atrás para encontrar advertencias en dos noches negras en su carrera en Europa. En 2004, el Milan cayó en cuartos de final frente al Deportivo de La Coruña tras ganar 4-1 en la ida. En España perdió por 4-0, en lo que es la mayor remontada en la máxima categoría del fútbol continental.

Un año después le siguió la pesadilla número 2: en la final de Estambul contra el Liverpool, el Milan de Ancelotti vencía al descanso por un 3-0 que parecía insuperable. Pero los ingleses lograron empatar con una espectacular reacción en la segunda mitad y se impusieron luego en los penales.

"Carlo lo hará para que no vivamos ninguna La Coruña o Estambul", dijo Rummenigge, confiado en su entrenador jefe. El italiano no reservará a ninguna estrella. Rafinha podría sustituir al suspendido Philipp Lahm, cuya banda de capitán portará el arquero Manuel Neuer.

Distintos actores y distinta competición, pero otro equipo alemán, el Borussia Mönchengladbach, ya sabe lo que es caer pese a contar con una ventaja de 5-1 de la ida, ya que en 1985, con Jupp Heynckes en el banco, perdió 4-0 en a vuelta ante el Real Madrid.

"Ya hubo equipos que remontaron desventajas así. No quiero ponerme en el grupo de los que lo permitieron", dijo el defensa bávaro Mats Hummels.

En Inglaterra, el Bayern quiere mantener el nivel actual que lo ha convertido de nuevo en un auténtico candidato al triplete. Rummenigge recomendó no obstante asumir las tareas con humildad.

"Así lo hicimos en 2013 con Heynckes. Y así lo haremos ahora también", señaló el ex futbolista.

El español Javi Martínez pidió "pisar al máximo el acelerador". Pese a que no atraviesa su mejor momento, advirtió el defensa, el Arsenal sigue siendo "peligroso".

En cualquier caso, si todo va según lo normal, el Bayern regresará a Múnich con el billete a cuartos de final y 6,5 millones de euros (6,89 millones de dólares) de premio en la maleta.