Policía de Berlín registra apartamentos de manifestantes propalestinos



 DPA

La policía de Berlín registró hoy los domicilios de cinco activistas propalestinos, entre ellos el de un hombre que se cree que lanzó un soporte de micrófono hacia un político local.


La Policía y la Fiscalía de la capital de Alemania declararon que los cinco hombres son sospechosos de haber cometido delitos penales "a través de actividades presuntamente propalestinas".


Los hombres, de entre 18 y 40 años, son sospechosos de alteración del orden público, incitación y utilización de símbolos de organizaciones anticonstitucionales.


Unos 125 policías participaron en las redadas en apartamentos de los distritos de Friedrichshain, Britz, Gropiusstadt, Tegel y Schöneberg, sin realizar detenciones.


Al parecer, el joven de 18 años arrojó un pie de micrófono al titular de Cultura de Berlín, Joe Chialo, durante la inauguración de un centro de arte a mediados de septiembre.


Chialo presionó para que se retiren los fondos públicos a los grupos artísticos que condenan a Israel, incluso participando en llamamientos al boicot del país por la guerra de Gaza y las políticas hacia los palestinos en los territorios ocupados.


En el acto, un grupo de unas 40 personas coreó diversos eslóganes e insultó presuntamente a Chialo. Al parecer, el joven es sospechoso de alteración del orden público con tentativa de lesiones graves.


También se investiga a un hombre de 31 años sospechoso de incitación por dos comentarios realizados en Instagram. El hombre habría escrito un post manifestando "el deseo del regreso de Adolf Hitler", y en otro post el deseo de "un nuevo Holocausto", según los fiscales.


Las protestas propalestinas en Alemania, y en particular en Berlín, han sido uno de los principales focos de tensión desde los atentados terroristas del 7 de octubre de 2023 contra Israel y el inicio de la guerra en la Franja de Gaza.


Las autoridades alemanas han tratado de reprimir las protestas que, según ellas, se vieron empañadas por comentarios y consignas antisemitas, así como por incidentes violentos.


Los críticos, sin embargo, acusaron a la Policía alemana de reprimir la libertad de expresión.