Inflación en Alemania se mantiene alta en 8,7 por ciento en febrero

Wiesbaden (Alemania), 1 mar (dpa) - La inflación en Alemania se mantuvo alta en febrero con un 8,7 por ciento por encima de la registrada en febrero de 2022 y sin modificaciones respecto a enero de este año, informó hoy la Oficina Federal de Estadística (Destatis) en base a cifras preliminares.


La inflación se ha visto impulsada durante meses por los precios de la energía y los alimentos. Según Destatis, la energía costó en febrero un 19,1 por ciento más que un año antes. A su vez, los precios de los alimentos subieron un 21,8 por ciento interanual.


Los economistas no esperan una gran moderación de los precios en el año en curso, aunque probablemente ya haya pasado el punto álgido de la subida. Según los expertos, la inflación se ha generalizado y afecta a muchos productos además de la energía y los alimentos. Además, argumentan que el aumento de los salarios también podría alimentar la subida de precios.


Por su parte, los frenos a los precios del gas y la electricidad, que se aplicarán con carácter retroactivo del 1 de marzo al 1 de enero de 2023, deberían tener un efecto moderador en el año en curso.


El Gobierno alemán espera una tasa media de inflación del seis por ciento en 2023.


A medio plazo, el Banco Central Europeo (BCE) aspira a la estabilidad de precios en la zona euro, con una tasa de inflación del dos por ciento. En enero, la tendencia al alza de los precios volvió a debilitarse, pero los precios al consumo en dicha zona aumentaron un 8,6 por ciento con respecto al mismo mes del año pasado.


El BCE está tratando de combatir la persistente inflación con subidas de los tipos de interés. Tras cinco subidas consecutivas desde julio, el tipo de interés básico de la zona euro se sitúa ahora en el 3,0 por ciento. Está previsto que el próximo 16 de marzo, el BCE suba los tipos en 0,5 puntos.