Muere Carl Hahn, el ejecutivo que hizo de Volkswagen una multinacional

Por Thomas Strünkelnberg (dpa)

Wolfsburgo (Alemania), 15 ene (dpa) - ¿El mercado chino? No es interesante y no es una buena idea, consideraban otros. Pero Volkswagen impulsó la entrada en China ya a principios de los 80.


El responsable fue en ese entonces el presidente de la empresa Volkswagen Carl H. Hahn. "Para nuestra suerte, casi nadie se interesaba en aquel entonces por ir allí", dijo Hahn a los 92 años a la revista interna de la compañía "Inside".


Hubo muchos críticos de esa decisión, incluso en la política, pero el tiempo le dio la razón: China se convirtió en el mercado más importante de la compañía y Hahn transformó a Volkswagen en una corporación mundial. El expresidente de la empresa alemana murió este sábado a los 96 años.


¿Quién no recuerda el primer Santana, el coche anguloso de los 80, que en su momento fue pensado como una especie de Passat de lujo? En Europa y sobre todo en Alemania la idea no necesariamente funcionó, pero sí en China a partir de 1983.


"Con solo 5.000 vehículos vendidos prácticamente de la noche a la mañana ya en el primer año tuvimos una cuota de mercado del 27 por ciento", recordaba Hahn. De esa manera, el ejecutivo de Volkswagen refutaba a sus críticos de la economía y la política: "Todos me consideraban un loco".


Hoy en día aún hay críticas a la presencia de Volkswagen en China, sobre todo a la fábrica en la región de los uigures Xinjiang. Pero sobre la importancia económica del país para la compañía no hay dudas.


El país del Lejano Oriente es el mercado más importante para Volkswagen. A principios de 2019, el entonces presidente de la empresa Herbert Diess declaró el negocio en China de prioridad máxima. "El futuro de Volkswagen se decidirá en el mercado chino", dijo Diess entonces.


Por esas palabras Diess fue aplaudido por su antecesor Carl Hahn, quien dijo que Volkswagen tenía una posición extraordinaria en el país, pero que había que defenderla.


"En el tema de la movilidad eléctrica los chinos están adelantados al mundo", subrayó. Para su cumpleaños 95, admitió que posteriormente era difícil de entender por qué se desconocieron durante tanto tiempo las ventajas de la movilidad eléctrica.


Una y otra vez se acusaba al fabricante alemán de haberse quedado dormido en el tema de la movilidad eléctrica. La pandemia de coronavirus y los fuertes brotes en China afectaron en los últimos tiempos a las ventas en ese país.


Hahn, nacido en Chemnitz en 1926, inició su carrera en Volkswagen en 1954 como director de promoción de exportaciones. Entre 1959 y 1964 dirigió el negocio estadounidense de Volkswagen.


De regreso en Wolfsburgo, en 1965 se convirtió en miembro de la junta directiva y en jefe de ventas del grupo. Tras diferencias por la independencia de Audi con el entonces presidente de Volkswagen Rudolf Leiding se produjo la ruptura: Hahn dejó la automotriz y asumió en 1973 la dirección del fabricante de neumáticos Continental.


Tan sorpresivamente como dejó Wolfsburgo, en 1982 regresó a Volkswagen como presidente de la junta directiva. Bajo su mando, la empresa se convirtió en el mayor fabricante de coches de Europa y comenzó la globalización.


Tras la entrada en China en 1982, en 1986 le siguió la adquisición de la española Seat, en 1989 Volkswagen inició negocios en la ex República Democrática Alemana y el este de Europa y en 1991 adquirió al fabricante checo de automóviles Skoda.


En 1992, Hahn entregó el puesto a Ferdinand Piëch, posteriormente conocido como "el patriarca de Volkswagen". Hasta 1997, Hahn siguió siendo parte del consejo de vigilancia.


Tras su salida de la compañía, Hahn, que estaba casado y era padre de cuatro hijos, siguió muy activo como escritor y orador. El actual presidente de Volkswagen, Oliver Blume, rindió hoy homenaje a Hahn describiéndolo como "un visionario y una personalidad extraordinaria".