Bundestag alemán aprueba el nuevo subsidio de desempleo

Berlín, 10 nov (dpa) - El Bundestag (Cámara Baja del Parlamento alemán) aprobó hoy la conocida como renta básica o ciudadana ("Bürgergeld"), sustituta de la ayuda social al desempleo Hartz IV.

La propuesta, presentada por el Gobierno de coalición, compuesto por socialdemócratas, ecologistas y liberales, fue aprobada por 385 votos, frente a 261 en contra. Se produjeron 33 abstenciones.

Sin embargo, para su aprobación definitiva deberá recibir el apoyo del Bundesrat (Cámara Alta), cuya votación está prevista para el lunes.

La alianza conservadora CDU/CSU amenazó con bloquearla debido a que, en su opinión, el nuevo sistema puede reducir la motivación de las personas para acceder a un empleo. Tras el debate de hoy en el Bundestag, el ministro de Trabajo, el socialdemócrata Hubertus Heil, pidió la aprobación en la Cámara Alta.

De aprobarse, a partir del año que viene las personas solteras con ingresos muy bajos o desempleadas desde hace tiempo pasarán a recibir 502 euros al mes (502,45 dólares), en lugar de los 449 euros que recibían hasta ahora.

Los adultos que viven con sus parejas obtendrán 451 euros, los jóvenes mayores de 14 años 420 euros, los niños de 6 a 14 años 348 euros y los menores de 6 años, 318 euros.

También se ha modificado el mecanismo de ajuste en vista de la elevada inflación y se ha establecido que en el futuro deba reflejar la evolución de los precios de forma más rápida y eficaz.

Además, está previsto que se reduzca la presión sobre los desempleados en las oficinas de empleo. En lugar de dar prioridad a la inserción laboral, se potenciará la formación continua.

Asimismo, la renta ciudadana cubrirá los gastos de vivienda en los dos primeros años y se permitirá mantener unos ahorros de hasta 60.000 euros en el mismo periodo de tiempo. Tampoco se impondrán multas en los primeros seis meses, por ejemplo si se rechaza una oferta de trabajo.

Las controvertidas normas Hartz IV, promulgadas hace unos 18 años, fueron una parte fundamental del legado del excanciller Gerhard Schröder (1998-2005).

El socialdemócrata fue criticado y se enfrentó a protestas en las calles por impulsar las reformas, que presionaban más a los desempleados para que encontraran trabajo introduciendo sanciones si no aceptaban los puestos que se les ofrecían al tiempo que recibían las ayudas estatales.