Por Andreas Schirmer (dpa)
Fráncfort, 31 oct (dpa) - El entrenador del Leipzig, Jesse Marsch, descartó de momento a su equipo como favorito al título y perseguidor del Bayern Múnich en la Bundesliga tras un empate de 1-1 en terreno del Eintracht Frankfurt el sábado por la noche.
"En estos momentos no somos uno de los equipos que luchan por el campeonato", dijo enfadado.
Una vez más, los subcampeones desaprovecharon muchas ocasiones de gol y concedieron el empate por medio de Tuta segundos antes del pitido final, después de que Youssuf Poulsen hubiera adelantado al Leipzig para el 1-0 (minuto 35).
"No estuvimos lo suficientemente frescos frente a la portería. Si lo hubiéramos hecho, podríamos haber marcado cuatro o más goles", dijo el técnico estadounidense y encontró un término apropiado de su país para el actual problema del Leipzig: "cohete roto".
Dijo que no fue "divertido" ver tantas ocasiones desaprovechadas: "No estoy nada contento".
Si el ataque hubiera sido más efectivo, esto no solo habría dado un impulso para el partido de vuelta de la Liga de Campeones que el Leipzig disputará el miércoles contra el Paris Saint-Germain.
Con una victoria, los sajones habrían subido al cuarto puesto de la tabla, en lugar de ser octavos, con 15 puntos, y quedar a diez de distancia del líder Bayern Múnich.
"Pero ahora tenemos que mantenernos fuertes y positivos", urgió Marsch, y subrayó: "Tenemos una gran plantilla y creemos en nuestra forma de jugar".
Sin embargo, el Leipzig lleva ocho partidos sin ganar fuera de casa esta temporada. "Es una verdadera lástima, la victoria fuera de casa estaba a nuestro alcance. No hemos sido lo suficientemente fríos", dijo Marsch.
El mánager del Leipzig, Oliver Mintzlaff, se mostró preocupado por el empate en el último minuto. "El hecho de que hayamos recibido el 1-1 en el último minuto del tiempo añadido es muy amargo", dijo el dirigente, visiblemente contrariado. "No se siente como un empate, sino como una dura derrota".
El Leipzig no puede permitirse el lujo de lamentarse durante mucho tiempo con vistas al partido en casa contra el rival francés. Después de tres derrotas en la máxima categoría del fútbol europeo necesita una victoria contra el PSG para poder acceder a los octavos de final.
"Tenemos que ganar y, sin duda, afrontaremos el partido con ilusión", expresó Marsch, cuya confianza se vio reforzada por dos cambios en la plantilla parisina. Kylian Mbappé se ausentó por enfermedad ante el OSC Lille (2-1) y Lionel Messi tuvo que ser sustituido en el descanso por problemas musculares.
Para el entrenador del Leipzig, André Silva es un candidato al once inicial para reforzar su ofensiva. "Lo de André aún no va a la perfección, pero es normal", dijo Marsch. "Creo que puede jugar desde el principio contra el París".
El portugués entró como sustituto contra el Frankfurt. Mientras que la temporada pasada marcó 28 goles con su ex club, en el Leipzig solo ha anotado dos. "Seguro que se convertirá en un jugador importante para nosotros", se mostró convencido Marsch.
Los alemanes desperdiciaron una ventaja de 2-1 en el partido de ida en París y acabaron perdiendo por 3-2.
"En la Liga de Campeones queremos hacer puntos", anunció el portero Peter Gulacsi. "Hemos evolucionado bien en algunas cosas, pero todavía hay margen de mejora".
El autor del gol, Poulsen, también valoró positivamente la actuación en Fráncfort a pesar del amargo final. "En realidad, solo hicimos algo mal en los últimos 30 segundos del partido", dijo el danés.
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