Ultraderechista alemana AfD será sometida a la vigilancia del Estado


Berlín, 3 mar (dpa) - La ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), el principal partido opositor en el Parlamento alemán, ha sido declarada sospechosa de extrema derecha, confirmaron hoy a dpa fuentes de la inteligencia alemana.

Esto significa que, a partir de ahora, el partido puede ser observado por los servicios secretos internos.

Según la información de dpa, el presidente de la entidad, Thomas Haldenwang, informó de ello a los servicios secretos de los estados federados en una videoconferencia interna celebrada hoy.

La cúpula de la AfD sostuvo indignada que se trataba de una maniobra política con el objetivo de perjudicarla en el año en que se dirimen seis elecciones regionales y las generales del 26 de septiembre.

"La actuación de la Oficina de Protección de la Constitución es escandalosa", dijo el copresidente Tino Chrupalla.

"Aunque la autoridad no puede anunciar la clasificación como caso sospechoso, lanza la información correspondiente a los medios de comunicación para influir así en la contienda democrática entre partidos en detrimento de la AfD", indicó.

La AfD se convirtió en las elecciones generales de 2017 en el tercer partido más fuerte de Alemania, con 12,6 por ciento de los votos, y el primero dentro de los partidos opositores en el Bundestag, lo que provocó una conmoción en la clase política germana. Tiene 92 diputados en el hemiciclo de Berlín.

Los servicios secretos alemanes ya catalogaron como sospechosa de extrema derecha a un ala radical del partido que fue posteriormente disuelta a nivel oficial así como a una rama regional de la AfD en el estado de Brandeburgo.

La agencia de inteligencia interna declinó efectuar comentarios debido a un juicio que transcurre actualmente. "En vista de los procedimientos en curso y por respeto al tribunal, la Oficina Federal de Protección de la Constitución no hace comentarios públicos sobre este asunto", dijo la autoridad con sede en Colonia.

La AfD ha presentado una demanda ante un tribunal administrativo de Colonia contra una posible clasificación como caso sospechoso de extrema derecha. En principio, esta clasificación también permite reclutar informantes que proporcionan datos del partido al servicio de inteligencia nacional.

La Oficina Federal de Protección de la Constitución se comprometió ante el tribunal a no vigilar a los candidatos y diputados del partido por medios de inteligencia hasta el final del procedimiento sumario.

Además, hasta la conclusión del procedimiento, el servicio de inteligencia nacional aseguró que se abstendrá de anunciar públicamente si ha clasificado a la AfD como un caso sospechoso o seguro de extrema derecha.

"El hecho de que la Oficina Federal de Protección de la Constitución vaya ahora a observar a la AfD en todo el país no es ninguna sorpresa", manifestó Mathias Middelberg, portavoz de política interior del grupo parlamentario de las uniones demócrata y socialcristianas (CDU/CSU).

"El partido nunca se ha distanciado claramente de los extremistas de derecha como el señor Höcke", sostuvo Middelberg, en referencia al líder de la AfD en el estado de Turingia, Björn Höcke, uno de los principales dirigentes de la disuelta ala radical.

En la AfD se libra desde hace años una lucha de poder entre la corriente nacionalista de derechas y los que se autodenominan moderados. Los llamados moderados en torno al copresidente Jörg Meuthen son actualmente mayoría en el comité ejecutivo federal.

El año pasado, la AfD vio reducirse el número de afiliados de 34.750 a unos 32.000 miembros. Se trata de la primera pérdida de afiliados en cinco años. Asimismo han dejado la agrupación políticos con cargos electos alegando una creciente influencia de la corriente de extrema derecha en la formación.