Arzobispo de Hamburgo renuncia a su cargo tras informe sobre abusos


Hamburgo/ Colonia (Alemania), 18 mar (dpa) - El arzobispo de Hamburgo, Stefan Hesse, presentó hoy al Papa Francisco la renuncia a su cargo por incumplimiento de sus obligaciones en la tramitación de las denuncias de abusos sexuales perpetrados en el seno de la Iglesia.

"Para evitar el daño al arzobispado, así como a la archidiócesis de Hamburgo, ofrezco al Papa Francisco mi renuncia al cargo y le pido que me libere de mis funciones inmediatamente", declaró hoy el prelado.

Un informe hecho público hoy sobre la gestión de los abusos sexuales en la Iglesia alemana llevado a cabo por el abogado penalista Björn Gercke acusó a Hesse de cometer once infracciones en la gestión de denuncias por abusos sexuales.

La mala gestión de las denuncias puesta al descubierto por el informe también fue el motivo por el que el cardenal de Colonia, Rainer Maria Woelki, relevara hoy temporalmente de sus funciones a dos funcionarios eclesiásticos.

"Basándome en lo que acabo de escuchar, me gustaría relevar temporalmente de sus funciones con efecto inmediato al obispo auxiliar Schwaderlapp y al vicario Assenmacher", indicó el prelado.

"Pido al Papa Francisco que me juzgue", declaró hoy el obispo auxiliar Schwaderlapp en Colonia, "no puedo ser juez en mi propia causa", añadió.

Schwaderlapp expresó su culpabilidad y dijo avergonzarse de "haber prestado muy poca atención a lo que sienten las personas heridas, a lo que necesitan y a lo que esperan de la Iglesia". Además, dijo reconocer sus errores como obispo, sacerdote y ser humano.

"A las personas a las que no he hecho justicia, les pido sinceramente perdón en este momento, aunque sé que lo que ha ocurrido no tiene vuelta atrás", indicó.

El informe reveló que 202 personas de la archidiócesis son sospechosas de estar implicadas en el escándalo, y que el 63 por ciento de los acusados son clérigos.

En casi la mitad de los casos (47 por ciento) las denuncias se refieren a abusos sexuales o a abusos sexuales graves. El resto se clasificaron como violaciones de los límites y otras conductas sexuales indebidas.

La mayoría de las víctimas eran niños, según el informe.

El abogado Gercke criticó a la diócesis por la documentación que había proporcionado en el curso de la investigación, diciendo que había "deficiencias significativas con respecto a la organización y gestión de los archivos en la archidiócesis".

"Tuvimos la impresión de que faltaban partes de los expedientes porque la forma en que se llevaron a cabo los procedimientos era incomprensible", añadió.

El informe presentado por los abogados consta de 800 páginas. La evaluación de los expedientes desde 1975 hasta 2018 mostró, entre otras cosas, "que durante décadas nadie se atrevió a denunciar estos casos", indicó Gercke.

Un primer informe de un bufete de abogados de Múnich había sido guardado bajo llave por el cardenal Woelki, lo que provocó el encargo de un informe independiente.