Estudio: Pymes alemanas, muy cautas a la hora de invertir

Stuttgart (Alemania), 1 feb (dpa) - Las empresas pequeñas y medianas (pymes) de Alemania, pilar de la economía del país, siguen siendo cautelosas en cuanto a las inversiones y los nuevos puestos de trabajo en vista de las inciertas consecuencias de la pandemia de coronavirus, según un estudio publicado hoy por la consultora EY.

Aunque el estado de ánimo sigue siendo predominantemente positivo y la situación financiera de muchas empresas buena, menos compañías tienen previsto aumentar las inversiones o el número de empleados que en años anteriores, resume la consultora en su "Barómetro de las PYME 2021".

"En general, el sector de las pymes alemanas se muestra bien posicionado, incluso en tiempos de crisis", dijo el director de EY para Alemania, Hubert Barth.

Precisó que muchas se benefician ahora del hecho de que ya habían afrontado procesos de transformación antes de que estallara la pandemia y habían impulsado la digitalización.

De acuerdo con el informe, el 89 por ciento de las pymes encuestadas evalúa actualmente su situación como buena o bastante buena. Esto es sólo tres puntos porcentuales menos que hace un año.

Sin embargo, mientras que casi tres cuartas partes de las empresas de las industrias química y farmacéutica evalúan su situación de este modo, ni siquiera una de cada tres de la industria del automóvil lo hace. Precisamente el sector automovilístico reporta las expectativas más pesimistas para los próximos seis meses.

En el conjunto del sector conocido en alemán como "Mittelstand" las perspectivas son más positivas que en la mayoría de los años anteriores. Sin embargo, los datos se recogieron en noviembre y diciembre, por lo que en su mayor parte fueron anteriores al segundo cierre de la vida pública, que sigue vigente.

El 57 por ciento dijo que hasta entonces se las había arreglado sin ayuda del gobierno, detalla EY. El resto recurrió a una o varias ofertas, la mayoría de ellas -el 36 por ciento- al subsidio para reducir la jornada laboral de los empleados.

El sector más afectado fue el de la industria del automóvil. Casi una de cada cuatro empresas de este ramo evalúa actualmente la situación como crítica.

El estudio constató además una contención general del gasto. Solo el 16 por ciento dijo que tenía intención de aumentar sus inversiones en los próximos meses. Se trata de la cifra más baja desde 2007. Asimismo, el 16 por ciento reportó planes de ampliar la plantilla, el número más bajo desde 2010.

"Dada la falta de claridad de las perspectivas, esto es comprensible", dijo el experto en pymes de EY Michael Marbler, quien advirtió al mismo tiempo que existe el riesgo de que las innovaciones no se materialicen y la competitividad se resienta a medio plazo.

"La reticencia a contratar nuevo personal también puede caer rápidamente en los pies de las empresas", dijo Marbler. Más de la mitad sigue quejándose de la falta de trabajadores cualificados como el mayor problema para su propio desarrollo. "El coronavirus no cambia eso".