Fráncfort, 24 sep (dpa) - La aerolínea alemana Lufthansa quiere posibilitar mayor cantidad de vuelos intercontinentales ofreciendo test rápidos de coronavirus obligatorios a los pasajeros inmediatamente antes del despegue, confirmó hoy un portavoz en Fráncfort.
En principio, se trata de un proyecto piloto para algunas conexiones en Estados Unidos que se iniciará en octubre. La idea es que los resultados negativos liberen a los pasajeros de la prohibición de ingreso vigente actualmente. Claro que para ello es necesaria la aprobación de los Gobiernos involucrados, aseguró el portavoz.
El sector de la aviación considera que los test son además una alternativa a las disposiciones sobre cuarentenas obligatorias previstas en el caso de ingreso de personas provenientes de territorios de riesgo.
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) aseguró que estos test se podrán obtener a un precio inferior a los diez euros (unos 11,65 dólares) y que ofrecerán resultados en el transcurso de 15 minutos. No es necesario que los realice personal médico.
El presidente de IATA, Alexandre de Juniac, se pronunció el martes a favor de estos test obligatorios para todos los vuelos pero cargando los costos a los Estados.
"Estamos trabajando en concreto con socios en Estados Unidos en algunos trayectos transatlánticos, para recoger en nuestros clientes y en nosotros experiencias en el manejo de estos test rápidos y de determinadas medidas preventivas del coronavirus", dijo el portavoz de Lufthansa.
Añadió que ya se está en contacto con varios fabricantes farmacéuticos y prestadores de servicios. En concreto, mencionó a Roche y a Abbott. En las próximas semanas, se encargarán los primeros lotes y se ofrecerán a los clientes.
En principio, Lufthansa no tiene previsto realizar las pruebas con personal propio. Hasta ahora en el caso de los test voluntarios en el aeropuerto de Fráncfort la empresa recurrió a los servicios de la compañía Centogene. También se está analizando trasladar los costos de estas pruebas a los pasajeros.
El tráfico internacional se encuentra fuertemente limitado como consecuencia de la pandemia de coronavirus. Las reglas y prohibiciones de ingreso que cambian constantemente dificultan la planificación también para los pasajeros. De hecho, las compañías aéreas vuelven a registrar muy pocas reservas tras una ligera subida en el verano (boreal).
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