Presidente alemán agradece a iglesias en primera misa con fieles
"Se han comportado de manera responsable y prudente desde el principio", subrayó el alto funcionario alemán tras haber participado junto a su esposa del primer servicio religioso con fieles en diez semanas celebrado el domingo en la iglesia evangélica de Santa María (Marienkirche) de la capital alemana.
"Aceptan las restricciones de la vida religiosa para protegerse de la propagación del coronavirus. Y han tomado nuevos caminos en el cuidado pastoral para acompañar a los fieles en este tiempo de crisis", destacó Steinmeier.
El servicio religioso dominical se llevó a cabo bajo reglas estrictas, con un máximo de 50 personas en el interior de la iglesia. Un solo cantante acompañó a los organistas mientras los feligreses tarareaban ya que está prohibido cantar. Tampoco se permitió a los creyentes recibir la hostia en la eucarestía.
Todos los presentes llevaron una protección de boca y nariz, también Steinmeier y su mujer. "Fue muy agradable asistir hoy por primera vez nuevamente a un servicio dominical", declaró el político alemán luego de que finalizara la celebración religiosa.
"Incluso en condiciones especiales, con una mascarilla y en un círculo de personas más pequeño, esta es una experiencia de comunidad que nos llena de confianza y fuerza a los seres humanos. Mucha gente ha estado esperando esto durante semanas", dijo el presidente.
Desde marzo, no se permite celebrar servicios religiosos tradicionales en Alemania debido al riesgo de infección con el nuevo coronavirus. Esto fue particularmente difícil para los cristianos en Pascua, mientras que los musulmanes sufren ahora las restricciones durante el mes de Ramadán.
Muchas congregaciones eclesiásticas desarrollaron formas alternativas como los servicios de culto en línea, incluída también la de la Marienkirche en el centro de Berlín.
Iglesias de otros estados federados también pudieron celebrar hoy misas de domingo por primera vez, aunque bajo fuertes restricciones como en Berlín.
Kirsten Fehrs, la obispa de Hamburgo y Lübeck de la Iglesia Evangélica Luterana del Norte de Alemania, destacó en su sermón: "Estoy agradecida, como creo que muchos lo están, de que podamos volver a celebrar servicios religiosos. Más pequeño, pero lo celebramos".
Fehrs indicó que esta es una sensación completamente nueva después de semanas de servicios digitales. "Hoy estamos felices de haber recuperado una pequeña parte de libertad para moldear nuestras vidas", dijo en su mensaje en la ciudad de Hamburgo.
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