Alemanes compran muebles de playa para cumplir con "me quedo en casa"

Buxtehude/Sylt (Alemania), 11 abr (dpa) - Mientras que las playas alemanas del Mar del Norte y del Báltico siguen vacías debido a las restricciones por la crisis del coronavirus, los fabricantes de los típicos sillones con toldo para protegerse del sol y del viento que normalmente pueblan los balnearios no dan a basto para cubrir los pedidos.

"La demanda es enorme, no paramos de recibir encargos", señaló Kay Gosebeck, empresario de Buxtehude, en el norte de Alemania.

El fabricante añadió que uno de cada dos clientes le comenta al teléfono frases al estilo de: "Nos cancelaron las vacaciones y en lugar de eso queremos un sillón de playa cubierto para el jardín o para el balcón".

Svenja Möller-Trautmann, de una fábrica de la isla de Sylt, en el Mar del Norte, informó que también registra un aumento de pedidos por Internet, pero agregó que faltan los clientes que se llegan a la tienda del establecimiento, aquellos que prefieren elegir en persona la tela para los cojines y el toldo y sentarse para probar la comodidad del tradicional sillón.

Por su parte, la firma Bris de Ahrensbök, en el estado de Schleswig-Holstein, también tiene mucho que hacer. "Es una locura, la gente está en casa sin poder salir de vacaciones", comenta el propietario Angelo Bris. "Por eso deciden comprar un sillón de playa cubierto, para al menos tener un poco de ambiente del Báltico o del Mar del Norte en el propio jardín".