Con limitaciones sanitarias venezolanos intentan cumplir medidas anticoronavirus

VOA

Antes que el gobierno en disputa impusiera cuarentena colectiva para tratar de contener el coronavirus y que los negocios no esenciales cerraran sus puertas, los ciudadanos salieron a abastecerse de productos necesarios para una cuarentena.


Sin embargo, la mayor preocupación de muchos es la falta de agua en distintos puntos del territorio venezolano, situación que dificulta llevar a cabo el lavado de manos, una de las medidas de prevención del coronavirus.

“Pienso en mis papás que son de alto riesgo y viven en el interior del país donde se les va la luz, no hay agua, en ningún lugar del país hay las medidas necesarias para cubrir esta enfermedad o este virus que nos está asechando ahora”, afirma María Lozada a la Voz de América.

Las filas, que parecían haber quedado en el pasado, regresaron a los mercados, supermercados y farmacias de Venezuela. La incertidumbre sobre los efectos de las medidas del gobierno y la confirmación de casos de coronavirus en el país, llevó a muchos ciudadanos a abastecerse de la mayor cantidad de productos posible.

A pesar de que la Organización Mundial de la Salud recomienda que las personas infectadas sean quienes hagan uso de tapabocas, a medida que los casos confirmados se fueron incrementando en Venezuela, su uso se volvió obligatorio en mercados, farmacias y transporte público. Muchos optan por hacerlos ellos mismos por múltiples razones, una de ellas porque el costo de una mascarilla simple es de unos 0,50 centavos de dólar cuando el sueldo mínimo apenas alcanza los cuatro dólares.