Secretario de Estado de EEUU inicia visita a Alemania
Berlín, 7 nov (dpa) - El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, comenzó hoy un viaje de dos días a Alemania y visitó por la tarde Mödlareuth, un pueblo de apenas 50 habitantes apodado el "Pequeño Berlín" porque, en la época de la división del país, un muro fronterizo separaba la localidad.
Por la mañana visitó a las tropas estadounidenses en las bases de las localidades de Grafenwöhr y Vilseck, en el sur del país. En Grafenwöhr también presenció un entrenamiento militar.
En la actualidad, las Fuerzas Armadas estadounidenses tienen aún a unos 35.000 soldados estacionados en Alemania, 10.000 de ellos en Grafenwöhr y Vilseck.
Según informó el Departamento de Estado, Pompeo estuvo destinado en la década de 1980 como soldado estadounidense en Bindlach, cerca de Bayreuth, y entonces llegó a conocer los alrededores de Mödlareuth.
Pompeo se reunió con el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Heiko Maas, en Mödlareuth. Más tarde, partió con su homólogo germano a Leipzig, donde tenía previsto reunirse con activistas de derechos cívicos de la extinta Alemania socialista.
Asimismo figuraba en su agenda una visita a la sinagoga donde se produjo el atentado del 9 de octubre en Halle.
Con esta visita de dos días a Alemania, Pompeo quiere reforzar la alianza transatlántica. El Departamento de Estado anunció que las crecientes amenazas de Rusia, China e Irán han hecho necesario un mayor compromiso.
Pompeo aterrizó en Núremberg el miércoles por la noche, donde fue recibido por el embajador de Estados Unidos en Alemania, Richard Grenell. Antes de emprender el viaje, Pompeo había descrito Alemania como un "aliado importante y socio cercano de nuestro compromiso con Europa y el mundo".
"Espero con interés debates constructivos sobre cómo podemos abordar juntos muchas cuestiones internacionales importantes", escribió en Twitter.
Las relaciones germano-estadounidenses han sido tensas desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, asumió el cargo a principios de 2017.
El Gobierno estadounidense acusa a Alemania, país aliado en la Organización del Atlántico Norte (OTAN), de no cumplir con su compromiso en cuanto a los gastos destinados a defensa y de estar lejos del dos por ciento fijado por la OTAN. También criticó duramente el proyecto de gasoducto germano-ruso Nord Stream 2.
Trump amenazó además a la Unión Europea con aranceles punitivos que podrían afectar principalmente a la industria automovilística alemana.
Por la mañana visitó a las tropas estadounidenses en las bases de las localidades de Grafenwöhr y Vilseck, en el sur del país. En Grafenwöhr también presenció un entrenamiento militar.
En la actualidad, las Fuerzas Armadas estadounidenses tienen aún a unos 35.000 soldados estacionados en Alemania, 10.000 de ellos en Grafenwöhr y Vilseck.
Según informó el Departamento de Estado, Pompeo estuvo destinado en la década de 1980 como soldado estadounidense en Bindlach, cerca de Bayreuth, y entonces llegó a conocer los alrededores de Mödlareuth.
Pompeo se reunió con el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Heiko Maas, en Mödlareuth. Más tarde, partió con su homólogo germano a Leipzig, donde tenía previsto reunirse con activistas de derechos cívicos de la extinta Alemania socialista.
Asimismo figuraba en su agenda una visita a la sinagoga donde se produjo el atentado del 9 de octubre en Halle.
Con esta visita de dos días a Alemania, Pompeo quiere reforzar la alianza transatlántica. El Departamento de Estado anunció que las crecientes amenazas de Rusia, China e Irán han hecho necesario un mayor compromiso.
Pompeo aterrizó en Núremberg el miércoles por la noche, donde fue recibido por el embajador de Estados Unidos en Alemania, Richard Grenell. Antes de emprender el viaje, Pompeo había descrito Alemania como un "aliado importante y socio cercano de nuestro compromiso con Europa y el mundo".
"Espero con interés debates constructivos sobre cómo podemos abordar juntos muchas cuestiones internacionales importantes", escribió en Twitter.
Las relaciones germano-estadounidenses han sido tensas desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, asumió el cargo a principios de 2017.
El Gobierno estadounidense acusa a Alemania, país aliado en la Organización del Atlántico Norte (OTAN), de no cumplir con su compromiso en cuanto a los gastos destinados a defensa y de estar lejos del dos por ciento fijado por la OTAN. También criticó duramente el proyecto de gasoducto germano-ruso Nord Stream 2.
Trump amenazó además a la Unión Europea con aranceles punitivos que podrían afectar principalmente a la industria automovilística alemana.
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