Ministro alemán Altmaier espera que China implemente reformas
Mutianyu (China), 27 abr (dpa) - El ministro alemán de Economía, Peter Altmaier, espera que China implemente las reformas comerciales anunciadas por el Gobierno de Pekín con el fin de que las empresas germanas tengan más facilidades para invertir, señaló el ministro al final de su viaje al país asiático.
Según agregó Altmaier, Alemania quiere lograr que se vean progresos concretos en los próximos meses. El ministro planea volver a China en junio con una delegación de empresarios. Las firmas germanas que invierten en China quieren tener una perspectiva, señaló Altmaier.
Se trata de solucionar conflictos y crear condiciones operativas estables, lo que "facilita las inversiones", sostuvo el ministro.
Altmaier viajó el jueves a China para participar en una cumbre sobre la controvertida iniciativa de la "Nueva Ruta de la Seda". Mediante este proyecto, China planea invertir miles de millones de dólares en nuevas rutas comerciales entre Asia y Europa. Numerosos países se han plegado a esta iniciativa.
Alemania y otros Estados europeos contemplan estos planes con escepticismo, por ejemplo porque China no cumple con los estándares ecológicos internacionales.
El ministro germano visitó durante el último día de su estancia en China la Ciudad Prohibida en Pekín y la gran muralla en Mutianyu, en las proximidades de la capital.
También dialogó con el viceprimer ministro chino, Liu He, sobre el conflicto comercial entre Estados Unidos y China.
Liu He es el encargado del Gobierno de Pekín de negociar con Washington. La reunión de Altmeier y el funcionario chino giró en torno a la búsqueda de soluciones para poner fin a la guerra comercial entre las dos mayores potencias económicas del mundo.
Altmaier espera una pronta solución del conflicto que también afecta a las economía germana y a la europea, que dependen en gran medida de los negocios con China y Estados Unidos. Además, la guerra comercial está frenando el crecimiento de la economía mundial, destacó el ministro alemán.
Altmeier hizo un balance positivo de su viaje. "Era escéptico cuando llegué, lo reconozco", comentó. Sin embargo, la conferencia fue mejor de lo que esperaba, reveló el ministro, ya que se notó la voluntad política para solucionar los problemas.
Asimismo, se observó un consenso a favor de la cooperación internacional, las reglas justas y mercados abiertos, puntualizó Altmaier.
Durante la conferencia, el presidente chino, Xi Jinping, prometió una mayor apertura de China. Según informó al final de la cumbre, en la reunión se firmaron acuerdos por un monto de 64.000 millones de dólares.
Según agregó Altmaier, Alemania quiere lograr que se vean progresos concretos en los próximos meses. El ministro planea volver a China en junio con una delegación de empresarios. Las firmas germanas que invierten en China quieren tener una perspectiva, señaló Altmaier.
Se trata de solucionar conflictos y crear condiciones operativas estables, lo que "facilita las inversiones", sostuvo el ministro.
Altmaier viajó el jueves a China para participar en una cumbre sobre la controvertida iniciativa de la "Nueva Ruta de la Seda". Mediante este proyecto, China planea invertir miles de millones de dólares en nuevas rutas comerciales entre Asia y Europa. Numerosos países se han plegado a esta iniciativa.
Alemania y otros Estados europeos contemplan estos planes con escepticismo, por ejemplo porque China no cumple con los estándares ecológicos internacionales.
El ministro germano visitó durante el último día de su estancia en China la Ciudad Prohibida en Pekín y la gran muralla en Mutianyu, en las proximidades de la capital.
También dialogó con el viceprimer ministro chino, Liu He, sobre el conflicto comercial entre Estados Unidos y China.
Liu He es el encargado del Gobierno de Pekín de negociar con Washington. La reunión de Altmeier y el funcionario chino giró en torno a la búsqueda de soluciones para poner fin a la guerra comercial entre las dos mayores potencias económicas del mundo.
Altmaier espera una pronta solución del conflicto que también afecta a las economía germana y a la europea, que dependen en gran medida de los negocios con China y Estados Unidos. Además, la guerra comercial está frenando el crecimiento de la economía mundial, destacó el ministro alemán.
Altmeier hizo un balance positivo de su viaje. "Era escéptico cuando llegué, lo reconozco", comentó. Sin embargo, la conferencia fue mejor de lo que esperaba, reveló el ministro, ya que se notó la voluntad política para solucionar los problemas.
Asimismo, se observó un consenso a favor de la cooperación internacional, las reglas justas y mercados abiertos, puntualizó Altmaier.
Durante la conferencia, el presidente chino, Xi Jinping, prometió una mayor apertura de China. Según informó al final de la cumbre, en la reunión se firmaron acuerdos por un monto de 64.000 millones de dólares.
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