La FAO y la UNESCO ponen de relieve su nueva alianza en el evento “Goût de France”

Los chefs son un elemento clave para promover sistemas alimentarios sostenibles y una alimentación saludable y diversificada




22 de marzo de 2019, París – Los chefs son agentes de cambio en la lucha contra el hambre y la malnutrición, y desempeñan un importante papel a la hora de inspirar a personas de todo el mundo para que apoyen la producción sostenible de alimentos, adopten dietas saludables y eviten el desperdicio alimentario.

Este fue el mensaje central de un simposio internacional organizado hoy por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y el Gobierno francés, durante el evento gastronómico “Goût de France” que se celebra esta semana en París.

“Tenemos que educar e inspirar a la gente para que adopte dietas saludables”, subrayó el Director General de la FAO, José Graziano da Silva. “La gastronomía –añadió- es cada vez más un campo que suscita gran interés, y los chefs figuran entre los actores que pueden moldear la opinión pública e influir en los consumidores”.

“La alimentación es, desde el alba de los tiempos, una dimensión esencial de los intercambios humanos, una importante actividad económica y la base de la organización de las sociedades. Este legado se transmite de generación en generación y se comparte a medida que las comunidades se fusionan. Crea lazos a nivel social y aumenta la curiosidad intercultural entre los países”, aseguró por su parte Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO.

Durante el evento, los responsables de la UNESCO y la FAO presentaron una publicación titulada “Los chefs como agentes de cambio”, una plataforma sobre el trabajo conjunto de ambas organizaciones que pone de relieve el papel de los chefs como promotores de dietas saludables y culturalmente diversificadas.

Cada vez son más los cocineros que promueven la cocina vinculada al territorio y a la cultura local, así como el consumo de alimentos frescos de la zona. Los chefs también se han involucrado cada vez más en el movimiento mundial para reducir el desperdicio de alimentos, abanderando los esfuerzos para reducir los desechos en sus propios restaurantes, así como empoderando a las comunidades locales para que luchen contra el desperdicio alimentario.

Las dietas poco saludables son la causa más importante de la obesidad, una pandemia mundial. Se estima que más de 2 000 millones de personas tienen sobrepeso, incluyendo alrededor de 670 millones que son obesas. El número obesos en el mundo podría eclipsar pronto al de personas subalimentadas, que actualmente se estima en 821 millones.
“Con el aumento de la obesidad, nuestros sistemas alimentarios deben cambiar y pasar de alimentar a las personas a nutrirlas con alimentos sanos y nutritivos”, advirtió Graziano Da Silva.
“Son factores importantes para la transformación que necesitamos en nuestros sistemas alimentarios”.

Didier Guillaume, Ministro francés de Agricultura y Alimentación, subrayó a su vez la importancia de las políticas alimentarias nacionales basadas en un enfoque positivo de la nutrición y que tengan en cuenta las dimensiones educativas, sociales y culturales de la alimentación.

En el evento de hoy también estaban presentes representantes del ámbito de la investigación, la sociedad civil, la agricultura y la gastronomía, que debatieron sobre los vínculos entre gastronomía y educación y sobre cómo pueden utilizarse para combatir la obesidad y el desperdicio de alimentos.