ONU: Muchos niños que salieron de Venezuela no habían probado las manzanas
EL NACIONAL
Inés López, monitora de campo en el puesto fronterizo de Colombia y Ecuador del Programa Mundial de Alimento de la Organización de la (ONU), sostuvo que las madres venezolanas dejaron de comprar la fruta por su alto costo
Inés López, monitora de campo en el puesto fronterizo de Colombia y Ecuador del Programa Mundial de Alimento de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), sostuvo que muchos de los niños que llegaban al lugar no habían probado las manzanas.
"Cuando empezó la emergencia, en el primer pico que tuvimos aquí en Rumichaca, comenzamos a entregar manzanas. Cuando las veían decían que solo habían visto las manzanas por dibujos, cuadernos y libros. Nunca personalmente", señaló López.
Explicó que las madres de los menores alegaban que desde hacía cuatro años no compraban manzanas por los altos costos de la fruta.
"Cuando vieron la manzana dijeron: ¿En serio es esto una manzana? Nuanca habían comido una y las madre decían que habían pasado cuatro años desde que habían probado una manzana por su costo. Para ellos era un majar y una satisfacción tener una manzana", dijo la monitora de campo.
Inés López, monitora de campo en el puesto fronterizo de Colombia y Ecuador del Programa Mundial de Alimento de la Organización de la (ONU), sostuvo que las madres venezolanas dejaron de comprar la fruta por su alto costo
Inés López, monitora de campo en el puesto fronterizo de Colombia y Ecuador del Programa Mundial de Alimento de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), sostuvo que muchos de los niños que llegaban al lugar no habían probado las manzanas.
"Cuando empezó la emergencia, en el primer pico que tuvimos aquí en Rumichaca, comenzamos a entregar manzanas. Cuando las veían decían que solo habían visto las manzanas por dibujos, cuadernos y libros. Nunca personalmente", señaló López.
Explicó que las madres de los menores alegaban que desde hacía cuatro años no compraban manzanas por los altos costos de la fruta.
"Cuando vieron la manzana dijeron: ¿En serio es esto una manzana? Nuanca habían comido una y las madre decían que habían pasado cuatro años desde que habían probado una manzana por su costo. Para ellos era un majar y una satisfacción tener una manzana", dijo la monitora de campo.
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