DJ alemán triunfa con música house en barrios negros de Sudáfrica

Johannesburgo (Sudáfrica), 23 mar (dpa) - Ralf Gum nació en una pequeña ciudad alemana, pero su atracción irresistible por un género musical con un alma africana lo llevó a Sudáfrica, donde se convirtió en un DJ estrella en barrios negros y un mentor para los talentos locales.

Los DJ's blancos son una minoría y los extranjeros son extremadamente escasos en la escena de música house en Sudáfrica, pero el alemán Ralf Gum abarrota los clubes de todo el país con una clientela predominantemente negra.

"Crecí con la música de Ralf, pero no tenía ni idea de que era alemán", dice Ntokozo Ndlovu, un estudiante de teatro de 23 años. "Su sonido tiene una calidad de fabricación casera profunda. Es muy sudafricano", añade.

Este músico de 45 años, de Wurzburgo, una ciudad de unos 125.000 habitantes en el sur de Alemania, ha recorrido un largo camino, y es la música que lo ha llevado.

Gum no viene de una familia musical, descubrió "un gran amor por la música" a los 12 años de edad. Luego estudió ingeniería y administración de empresas, al mismo tiempo que mezclaba su propia música y la ponía en las discotecas y clubes locales.

A pesar de su origen europeo, encontró su estilo en la música house, un género de música electrónica que se originó en Chicago a inicios de los años 80 y que fue asociado al ambiente afroamericano y gay.

"La música house se puede mezclar con muchos estilos, con elementos latinos, afro o de jazz", explica el alemán de 45 años.

Su carrera como ingeniero nunca se materializó, ya que lo comenzaron a contratar como DJ fuera de Europa, en Asia, en las Américas y, en 2008, en Sudáfrica, Botsuana y Swazilandia.

"Alguien me recogió del aeropuerto en Johannesburgo, encendió la radio en el coche y allí escuché un tema house que yo conocía y me gustaba. En Alemania, la música house es un estilo especial, no de masas, ¡y aquí la ponen en la radio nacional!" recuerda su asombro.

La música house original tiene en parte raíces afroamericanas y la gente en el sur de África la reconoce enseguida, asegura Gum. "En el house hay mucho soul y eso le gusta a la gente aquí. Fue fácil adaptar la música a los tambores y cánticos tradicionales", asegura.

En Sudáfrica, la música house fue también asociada a la lucha contra la discriminación racial en los últimos años del régimen del apartheid a fines de la década de los años 80 e inicios de los 90, lo que hizo aumentar la popularidad de este estilo musical entre la población de color.

Al principio, Gum volaba a Sudáfrica cada tres meses para sus actuaciones, hasta que en 2012 finalmente decidió radicarse con su esposa en las afueras de Johannesburgo.

"Fue interasante para mí ser parte de una escena en la que mi estilo de música estaba en sus orígenes, poder participar e influir en la transformación", reconoce Gum. Y con éxito: su título "Take me to my love" llegó al primer puesto del ránking sudafricano, su álbum "Never leaves you" vendió más de 20.000 unidades.

Gum afirma que nunca sufrió un acto de discriminación, a pesar de que muchas veces actúa en barrios de bajos ingresos en los que ninguna persona blanca pondría un pie. "La música es perfecta para conectar a la gente", asegura.

En Soweto, un área muy poblada de las afueras de Johannesburgo, la gente conoce a Ralf Gum. "Gum es muy popular en Soweto", dice Phillip K., un taxista que vive allí.

"Hay algunos DJ's blancos sudafricanos en el ambiente de música house, pero Ralf Gum es el único extranjero que conozco", señala Vinny Da Vinci, también DJ y productor de música.

El germano creó "Gogo music", su propio sello discográfico, en 2001. La primera vez que visitó Sudáfrica descubrió que sus producciones "Kissing strangers" y "All this love for you" ya eran éxitos en la radio del país.

Entre los artistas sudafricanos a los que Gum ayudó a ganar fama internacional se incluyen Black Coffee y Bucie. Sir LSG, un DJ que es músico y productor, está a punto de sacar su primer álbum bajo el sello de Gum.

"Para el poco tiempo que lleva aquí, ha contribuido mucho a la música", comenta Da Vinci.

Black Coffee ha actuado en Alemania, pero Gum dice que la escena de música electrónica de su país prefiere el techno, "un tipo de música más rápido y monótono", y no tanto el house que tiene más soul.

Gum, padre de dos hijos, considera Sudáfrica como su patria musical y prefiere momentáneamente vivir allí. "Pienso que me quiero quedar. Pero nunca digas nunca", finaliza.