Universidad forma refugiados para enseñar en colegios alemanes

Bielefeld, 10 ene (Alemania) (dpa) - Apoyar, alentar, ayudar: las maestras Shogine Kamoyan y Marva Sulaiman están en su salsa desde hace un par de horas. Estas mujeres que llegaron a Alemania procedentes de Armenia y Siria, son ahora profesoras oyentes en un colegio de Bielefeld, al oeste del país.


En un primer momento ambas apoyaron en las clases de inglés de quinto grado, ahora ayudan a los alumnos en matemáticas. "Añoraba mucho el trato con los niños", comenta Kamoyan. "Creo que nací para ser maestra, siempre tengo que retornar a la escuela." Dentro de un año, esto puede ser realidad para la mujer de 40 años.

Kamoyan y su compañera Sulaiman, de 29 años, forman parte de un proyecto modelo del estado federado de Renania del Norte-Westfalia en el que participan 25 pedagogos refugiados. El programa de la universidad de Bielefeld se dirige a refugiados con un buen dominio del alemán que hayan trabajado como docentes en sus respectivos países.

Tras participar durante un año en el programa, los refugiados pueden trabajar, por ejemplo, como maestros suplentes en Renania del Norte-Westfalia. La iniciativa recibió 270 solicitudes y en la actualidad participan en el proyecto ocho mujeres y 17 hombres de Afganistán, Armenia, Guinea, Irak, Pakistán y Siria.

Durante los primeros seis meses, los docentes extranjeros asisten a un curso de alemán para lograr el nivel requerido generalmente para estudiar en Alemania. Mejor es aún si alcanzan el nivel siguiente, equivalente al dominio del idioma que tiene un nativo. Un muy buen nivel de alemán "es necesario para que, posteriormente, los docentes sean tomados en serio por los alumnos", explica Renate Schüssler, de la universidad de Bielefeld. Tras el curso de alemán, los participantes hacen prácticas en colegios y se cualifican para trabajar en el marco del sistema educativo regional.

Kamoyan y Sulaiman se alegran de volver a las aulas. Kamoyan trabajó durante más de 18 años como profesora de inglés y español en Armenia, Sulaiman fue profesora de inglés en Siria. Ambas ya hablan alemán con fluidez. "Con este programa se cumplirá mi sueño de volver a trabajar como maestra", confiesa Sulaiman.

Claudia Hoppe, directora del colegio de Bielefeld que participa en el proyecto, cree que el modelo beneficiará a los escolares que provienen de familias extranjeras, es decir la mitad de los alumnos de su institución. Los profesores refugiados no sólo les ofrecen apoyo en clase, también les pueden servir de ejemplo, señala Hoppe.