Un Dortmund todavía en "shock" busca la remontada en Mónaco

Por Heinz Büse (dpa)

Mónaco, 18 abr (dpa) - El arquero Roman Bürki aún se despierta sobresaltado por las noches y el capitán Marcel Schmelzer reconoce que todavía no han superado el "shock", pero el calendario no ofrece respiro y el Borussia Dortmund deberá salir mañana otra vez al campo de juego con una misión más que difícil: vencer como visitante al talentoso Mónaco para avanzar a semifinales de la Liga de Campeones.
Sin hablar ante la prensa, el plantel del Dortmund partió hoy al Principado para jugar su tercer partido desde el ataque con explosivos a su autobús. Tres encuentros en una semana que no alcanzan a borrar la conmoción por el atentado, aunque sirven para distraer la mente.

"Es bueno tener un calendario tan apretado y no tener que estar sentado en el sofá pensando en lo que sucedió", comentó Bürki en declaraciones al diario "Bild".

El guardameta suizo, en una entrevista con el diario helvético "Der Bund", aseguró que todavía tiene problemas para dormir. "Me estremezco y me despierto sobresaltado. Lo peor es que no pude dormir ninguna noche del tirón", comentó. Y mencionó también otros síntomas: "Por ejemplo cuando te olvidas de comer, o cuando vuelves a verlo todo en el momento en el que cierras los ojos".

Tras el ataque sufrido el martes pasado en el camino al estadio para jugar el partido de ida de cuartos de final ante el Mónaco, el Dortmund jugó ya dos encuentros. Primero, el duelo postergado al día siguiente por el atentado, que se saldó con un triunfo por 3-2 del equipo monegasco. Y luego, una victoria por 3-1 ante el Eintracht Frankfurt en la Liga alemana de fútbol.

El domingo, los jugadores pudieron disfrutar del día libre, pasar la Pascua con sus familias y relajarse un poco tras el trauma. Sin embargo, el descanso es reducido y dos días después debieron abordar ya un avión rumbo a Niza, desde se dirigieron por tierra a Mónaco.

Los jugadores partieron en silencio y dejaron el contacto con los medios a cargo de Hans-Joachim Watzke, gerente del Dortmund, y del director deportivo Michael Zorc.

"Lo que ha hecho el equipo la última semana es extraordinario. Ello nos da fuerzas", afirmó Watzke. "Sabemos que las posibilidades son pequeñas, pero las hay". Zorc, sin embargo, aclaró que los directivos no tienen "ninguna exigencia con el equipo" tras lo sucedido.

En lo futbolístico, la esperanza del Dortmund se sustenta en buena medida en la recuperación de Marco Reus, que volvió tras su lesión con un gol ante el Frankfurt. El equipo llega además sin nuevas bajas, más allá de la del español Marc Bartra, operado de la mano como consecuencia del ataque, y de Mario Götze, André Schürrle y Sebastian Rode, ausentes desde hace tiempo en el Dortmund.

El Mónaco, sin embargo, es un equipo que demanda máximo cuidado. Los dirigidos por Leonardo Jardim ganaron cinco de sus seis partidos en casa en la actual edición de la Liga de Campeones y empataron el restante.

Además, lideran la Liga francesa y cuentan con un plantel lleno de jóvenes talentos y con atacantes temibles como Kylian Mbappé, la nueva joya del fútbol europeo, y el colombiano Radamel Falcao.

Convertido en una máquina de hacer goles, el Mónaco lleva ya 90 tantos en el campeonato local y 18 en la Champions. Y sus jugadores, en el partido de ida, ya demostraron no tener piedad del golpeado Dortmund.