Se encuentra una segunda célula inmune que alberga el VIH durante el tratamiento

VOA

El reto de encontrar una cura para el SIDA puede haberse vuelto más difícil. Los científicos han descubierto otra célula en el cuerpo donde el VIH -el virus que causa el SIDA- se esconde de una terapia diseñada para suprimirla a niveles indetectables en la sangre.


Las células - llamadas macrófagos - son parte del sistema inmunológico y se encuentran en todo el cuerpo, incluyendo en el hígado, los pulmones, la médula ósea y el cerebro. Después de que otras células inmunes han hecho su trabajo de destruir invasores extranjeros, estos grandes glóbulos blancos actúan como el equipo de limpieza. Ellos rodean y limpian desechos celulares, sustancias extrañas, células cancerosas y cualquier otra cosa que no es esencial para el funcionamiento de las células sanas. Además, aparentemente pueden albergar el VIH.

Un nuevo objetivo

Mientras que los fármacos antirretrovirales pueden conducir el virus del SIDA a niveles prácticamente indetectables, los científicos saben que si la terapia se interrumpe, una infección por el VIH puede llegar rugiendo de nuevo. Eso es debido a un reservorio viral que hasta ahora se ha pensado solamente para habitar las células T del sistema inmune - las células que son atacadas y destruidas por el virus del SIDA. Mucha investigación se dedica a tratar de encontrar maneras de erradicar el depósito de células T.

Esto puede significar que los investigadores deben encontrar maneras de eliminar el VIH de los macrófagos, también.

El hallazgo fue publicado en Nature Medicine por investigadores de la División de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Carolina del Norte.

Los investigadores demostraron en un modelo de ratón que en ausencia de células T humanizadas, los fármacos antirretrovirales podrían suprimir fuertemente el VIH en los macrófagos. Sin embargo, cuando la terapia fue interrumpida, el virus se recuperó en un tercio de los ratones. Esto, dicen los investigadores, es coherente con la infección persistente en la cara de la terapia de drogas.

Los investigadores dicen que su trabajo demuestra que cualquier posible terapia debe dirigirse a los macrófagos, además de las células T para erradicar los reservorios virales. Los investigadores dicen que ahora tienen más información que apunta a la complejidad del virus, y que dirigir el reservorio viral en las células T en la sangre no necesariamente trabajará con la lucha contra la persistencia del VIH en los macrófagos, que residen en los tejidos y son más difíciles de observar.

El autor principal, Víctor García, dijo que es posible que haya otros depósitos de VIH aún por descubrir.

La principal autora del estudio, Jenna Honeycutt, calificó el descubrimiento de "cambio de paradigma" en la forma en que los científicos deben ahora tratar de eliminar la infección persistente en individuos VIH positivos.

Los investigadores dicen que su siguiente paso es averiguar qué regula la persistencia del VIH en los macrófagos infectados. También están interesados ​​en encontrar intervenciones de VIH que erradiquen completamente el virus del SIDA del cuerpo.