Berlín, 7 ene (dpa) - El año pasado fueron deportadas de Alemania muchas más personas que en 2023, indican cifras oficiales dadas a conocer hoy en Berlín.
Según un portavoz del Ministerio Federal del Interior, en los once primeros meses de 2024 hubo un total de 18.384 deportaciones. En el conjunto del año anterior se habían producido 16.430 deportaciones.
Turquía ocupa el primer lugar entre los principales países de origen de las personas que fueron deportadas el año pasado. 1.720 ciudadanos turcos tuvieron que abandonar Alemania de esta forma en 2024. Los georgianos ocuparon el segundo lugar con 1.678 deportaciones, seguidos de personas procedentes de Siria, Afganistán, Macedonia del Norte, Albania, Serbia e Irak.
Georgia fue clasificado como país de origen seguro por Alemania a finales de 2023. Los países de origen seguros son aquellos en los que se supone que, en general, no hay persecución ni trato inhumano o degradante y, por tanto, el extranjero en cuestión no corre riesgo de sufrir daños graves en su país de origen. Esto facilita el rechazo de una solicitud de asilo.
Además, una solicitud de asilo no tiene efecto suspensivo. Esto significa que los afectados pueden emprender acciones legales ante los tribunales contra una decisión negativa de la Oficina Federal de Migración y Refugiados, pero después deben esperar el resultado del procedimiento en el extranjero.
Las personas procedentes de Georgia pueden viajar a Alemania sin visado para estancias cortas desde marzo de 2017.
Algunos de los extranjeros deportados en 2024 no fueron conducidos por las autoridades alemanas a sus países de origen, sino a otros países de la Unión Europea responsables de sus solicitudes de asilo en virtud de las llamadas normas de Dublín.
Esto se aplica en particular a las personas procedentes de Siria y Afganistán. De los 816 iraquíes que Alemania deportó en 2024, 615 personas fueron llevadas a Irak, según el Ministerio del Interior.
Un total de 1.361 ciudadanos afganos fueron deportados de Alemania el año pasado.
A finales de agosto, 28 delincuentes afganos habían sido deportados a su país de origen. Los talibanes islamistas han vuelto al poder en Afganistán desde agosto de 2021. Han sido criticados a nivel internacional, sobre todo por el recorte masivo de los derechos de las mujeres, pero también por la represión de activistas de derechos humanos, manifestantes y periodistas.
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