China rechaza injerencia en Taiwán durante visita de ministra alemana

Por Jörg Blank (dpa)

Pekín, 14 abr (dpa) - China rechazó hoy cualquier injerencia extranjera en Taiwán durante la primera visita de la ministra alemana de Relaciones Exteriores, Annalena Baerbock, mientras aumentan las tensiones en torno a esta cuestión.


Tras la reunión hoy de Baerbock con su homólogo chino, Qin Gang, este declaró a la prensa que Taiwán forma parte de China y que el país asiático "no admite ninguna intervención desde el exterior".


Qin Gang agregó que para "respetar de verdad" el principio de una sola China, los Estados deben rechazar las actividades separatistas en Taiwán. "La raíz original de los problemas" son las aspiraciones independentistas, dijo. "China no cederá ni un centímetro de territorio".


Por su parte, Baerbock expresó su preocupación por las tensiones en torno a Taiwán y advirtió de que cualquier desestabilización tendría graves consecuencias. Señaló que el 50 por ciento del comercio mundial pasa por el estrecho de Taiwán (estrecho de Formosa).


"La onda expansiva de semejante crisis económica" también afectaría a China, prosiguió Baerbock, y añadió que una escalada militar en torno a Taiwán sería un "escenario de horror" para todo el mundo.


"Los conflictos solo pueden resolverse pacíficamente", añadió la ministra y reiteró que Alemania reconoce el principio de una sola China, según el cual Pekín es reconocido como el único Gobierno legítimo y por tanto Alemania no mantiene relaciones diplomáticas con Taiwán.


Sin embargo, Baerbock subrayó que un cambio del statu quo por la fuerza no sería aceptable.


Pekín insiste en que Taiwán, una democracia autogobernada, forma parte de su territorio, a pesar de que Taiwán tiene un gobierno independiente desde 1949.


La reunión de Baerbock con Qin Gang también giró en torno al conflicto en Ucrania, en el que China todavía no ha condenado la actuación rusa. La ministra instó a Pekín a animar con más firmeza al presidente ruso, Vladímir Putin, a poner fin a la guerra.


"No suministramos ni suministraremos armas a las partes en conflicto", declaró Qin Gang y añadió que el papel de China en Ucrania es promover la reconciliación y avanzar en las negociaciones de paz."No echaremos madera al fuego", apuntó.


Por otro lado, Qin Gang dejó bien claro que China no quiere que le den lecciones sobre derechos humanos. "Lo que menos necesita China es un maestro de Occidente", afirmó.


Así, rechazó las anteriores críticas de Baerbock sobre la situación de los derechos humanos en el país asiático. Qin Gang aseguró que cada Estado tiene sus propias circunstancias y antecedentes culturales e históricos.


Según Qin Gang, cuando se trata de derechos humanos, "no hay normas uniformes en el mundo".


La ministra alemana indicó que la Carta y la Convención de los Derechos Humanos de la ONU establecen derechos humanos "universales" que todos los miembros de la ONU están obligados a respetar.


En respuesta a las acusaciones de persecución, especialmente de los uigures musulmanes de la región noroccidental de Xinjiang, Qin Gang dijo que no se trata de una cuestión de derechos humanos, sino de combatir el radicalismo y el separatismo y añadió que las fuerzas extranjeras deben mantenerse alejadas de la región.


Las declaraciones se produjeron en el segundo de los tres días de viaje de Baerbock a China.


Anteriormente, la ministra y su homólogo chino visitaron una empresa alemana de movilidad eléctrica, Vitesco, en la ciudad portuaria nororiental de Tianjin donde la firma produce motores eléctricos integrados y gestiona una unidad de investigación y desarrollo.