Joven trans aspira a ganar concurso "Miss Alemania"

Por Janet Binder (dpa)

Rust (Alemania), 28 feb (dpa) - Cuando Saskia von Bargen mira fotos antiguas de sí misma, ve a un varón que siempre prefirió jugar con niñas y ponerse vestidos.


Aunque al nacer la habían clasificado como varón, a los cinco años ya declaraba ser una niña. "Mis padres no tardaron en darse cuenta de que no se trataba de una fase", explica la joven de 19 años, que vive con sus padres y tres hermanas menores en la región de Ammerland, en el noroeste de Alemania.


A los once años comenzó a tomar bloqueadores hormonales para evitar la pubertad masculina. Dos años después le administraron hormonas femeninas, y a los 13 años anunció en el colegio su cambio de identidad sexual. Al cumplir la mayoría de edad, Saskia von Bargen se sometió a una operación de reasignación de sexo.


La joven se considera embajadora de la cuestión transexual. Por eso, también se presentó al actual certamen de "Miss Alemania" y es una de las diez candidatas que llegaron a la final del concurso, que se celebrará el 4 de marzo.


Los concursos de "Miss Germany" se celebran desde hace casi cien años. Hasta 2019, cuando la empresa que organiza el certamen hizo un cambio radical, las mujeres se mostraban en la pasarela en traje de baño.


Desde entonces, la atención se centra en la personalidad y las "misiones" de las concursantes. "Se supone que las candidatas deben servir de inspiración", señala Jil Andert, de la empresa Miss Germany Studios. Según la compañía, 15.000 mujeres se presentaron para el concurso de esta temporada.


Antes se preguntaba la altura y el peso durante el proceso de admisión, pero eso ya no ocurre, y la pasarela también es cosa del pasado. "La apariencia ya no juega ningún papel", asegura Andert.


Este año, por primera vez, la ganadora recibirá 25.000 euros (26.400 dólares), que podrá utilizar para su "misión".


Saskia von Bargen cree que para ella este formato es la "plataforma perfecta".


"Quiero contar mi historia y explicar lo que significa ser una mujer trans", destaca la joven.


Cuenta que sus padres aceptaron desde el principio que no quería vivir como un chico y la apoyaron en todo momento. Mientras que en el colegio tenía que llevar ropa de varón para evitar que la acosaran, en casa y en las vacaciones podía ponerse lo que quisiera. Ella misma eligió el nombre Saskia.


En el concurso de 2022, una mujer trans llegó a la final y este año Saskia aspira a ganar el título. Otras concursantes que llegaron a la última instancia son una deshollinadora que apuesta por las mujeres en los oficios y una partera que quiere crear un centro de maternidad.


"Es un reto comparar misiones individuales completamente diferentes en el transcurso del premio", destaca Jil Andert, que forma parte del jurado. Agrega que por ello se está estudiando la posibilidad de conceder en el futuro varios premios en distintas categorías.