Scholz considera la igualdad de género como una meta central del G7

 Berlín, 1 dic (dpa) - El canciller alemán, Olaf Scholz, planteó hoy que la igualdad de género es uno de los objetivos centrales a largo plazo de los países miembros del Grupo de los Siete (G7).

El socialdemócrata alemán sostuvo que es "indispensable" para los valores compartidos entre los Estados miembros tras un encuentro con el Consejo Asesor de Igualdad de Género del G7 en la Cancillería alemana.

El órgano consultivo presentó previamente a Scholz sus recomendaciones finales para 2022. Entre otras cosas, el consejo del G7 pide que se tengan más en cuenta las cuestiones de igualdad de género en las inversiones públicas.

Además de Alemania, Francia, Estados Unidos, Italia, Japón, Canadá y el Reino Unido integran el G7, el grupo de países más industrializados.

El canciller alemán destacó que las crisis actuales agravaron las desigualdades existentes. "Los avances en materia de igualdad, ganados con mucho esfuerzo y seguridad, fueron repentinamente puestos en duda o incluso anulados", dijo Scholz, en alusión a las concecuencias de la pandemia de coronavirus.

También agregó que la guerra rusa en Ucrania también afectó duramente a muchas mujeres. El canciller citó las denuncias de violencia de género: "Son bastante preocupantes y nos inquietan a todos profundamente".

Scholz subrayó que durante la presidencia alemana del G7, a lo largo de este año, se avanzó en el registro de desigualdades de género. El canciller se refirió al "Panel del G7 sobre las brechas de género", que los Estados crearon junto con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

La socióloga alemana Jutta Allmendinger, actual presidenta del Consejo Asesor sobre Igualdad de Género del G7, pidió una ampliación de la base de datos durante su visita a la Cancillería.

Allmendinger subrayó que la igualdad de género seguirá teniendo un papel central en el futuro. La socióloga afirmó que cuestiones importantes como la digitalización o el cambio demográfico afectarían a las mujeres "mucho más que a los hombres".

La experta citó a Canadá como un ejemplo positivo y explicó que ese país combinó una alta tasa de empleo femenino con bajas diferencias de género en el nivel de las pensiones. Para Allmendinger, por lo tanto, es posible superar las diferencias.