Crece la rivalidad entre refugiados libaneses y sirios por la asistencia social

 RFI - LAURE STEPHAN

En Líbano, las autoridades abogan por una repatriación gradual de los refugiados sirios, pues consideran que el país en crisis ya no está en condiciones de acogerlos como lo ha hecho durante más de diez años. Más de 1,5 millones de desplazados viven en el país, según Beirut. La ayuda internacional es motivo de disputa. Reportaje.

Si el violento colapso económico en curso en Líbano abre el camino a instrumentalizaciones populistas, también aumenta las rivalidades entre los libaneses más pobres y los refugiados sirios.


Layal, residente en Bebnine, en el norte de Líbano, ve cómo las relaciones entre libaneses y refugiados sirios se deterioran día a día. En el centro del problema está la competencia por la asistencia social. "Ahora hay fricciones. Mi familia, que es libanesa, no recibe ninguna ayuda. Los refugiados sirios disponen de todos los servicios de la ONU. ¡No tengo asistencia social! Y entre nuestros vecinos libaneses, muy pocos reciben alguna. Los sirios, en cambio, pueden contar con la ayuda mensual de la ONU", denuncia.


Sin embargo, la cantidad de ayuda es limitada y la ONU afirma haber apoyado a decenas de miles de familias libanesas en los últimos meses. Refugiado sirio, Fares vive en una tienda de campaña con su familia en condiciones difíciles. Le preocupa el creciente resentimiento hacia su pueblo con la crisis.

"Algunos piensan que vivimos mejor que ellos”

"Algunos libaneses están desempleados. Recibimos de la ONU menos de 100 dólares al mes para toda la familia. Pero los libaneses, ¿qué consiguen? Algunos piensan que vivimos mejor que ellos. La gente quiere poder vivir, sean libaneses o sirios. Espero que los libaneses también se beneficien de la ayuda internacional, para que no haya fricciones. Creo que nos espera una crisis mayor, mucho mayor que la que estamos atravesando, porque no hay dinero", lamenta.


Desde el inicio de la crisis en 2019 en el país, la pobreza se ha disparado tanto entre los libaneses como entre los refugiados sirios. Líbano experimenta una escalofriante subida de precios, mientras se suprimen las subvenciones a los carburantes. El 80% de los libaneses vive ahora por debajo del umbral de pobreza, según la agencia francesa AFP.