Itzehoe (Alemania), 20 dic (dpa) - El Tribunal Regional de Itzehoe condenó hoy a dos años de cárcel en suspenso a una antigua secretaria de un campo nazi de concentración, de 97 años, como cómplice en el asesinato de más de 10.000 personas.
Según la sentencia, la condenada, conocida solo por el nombre de Irmgard F. debido a las leyes alemanas de privacidad, trabajó como empleada civil en la comandancia del campo de Stutthof, cerca de la ciudad polaca de Gdansk, desde junio de 1943 hasta abril de 1945.
El tribunal determinó que, en el desempeño del trabajo que realizó cuando tenía 18 y 19 años, ayudó a los responsables del campo de concentración en el asesinato sistemático de los internos, por lo que accedió a la petición de pena hecha por la Fiscalía.
La acusada "ha recibido su veredicto judicial de culpabilidad por complicidad en varios miles de asesinatos. El derecho penal estatal no puede hacer más en términos de contenido", explicó el abogado Hans-Jürgen Förster, que representó a cuatro supervivientes del campo de Stutthof.
El juicio había comenzado el 30 de septiembre de 2021. Durante los 40 días de procedimiento, el citado tribunal escuchó como testigos a varios supervivientes del campo, que relataron el sufrimiento y las muertes masivas en Stutthof.
Sin embargo, el testigo más importante fue el del experto en historia Stefan Hördler, que presentó su dictamen pericial en 14 sesiones. La defensa presentó una moción de parcialidad contra él, pero el tribunal la rechazó.
En un principio, la acusada no quiso enfrentarse al proceso. El primer día del juicio, desapareció de madrugada de su residencia de ancianos en una localidad a las afueras de Hamburgo, en el norte del país.
La policía la detuvo horas después en una calle de la ciudad y el tribunal emitió una orden de detención contra ella por la que tuvo que pasar cinco días en prisión preventiva.
Tan solo al final del juicio rompió su silencio. "Siento todo lo que ha pasado", dijo en su última declaración, y añadió: "Lamento haber estado en Stutthof en ese momento. Es todo lo que puedo decir".
Según la Oficina Central encargada de la investigación de los crímenes nazis, unas 65.000 personas murieron en el campo de concentración alemán de Stutthof y sus instalaciones aledañas, así como en las llamadas marchas de la muerte organizadas allí al final de la Segunda Guerra Mundial.
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