Misión de la ONU denuncia asesinatos, desapariciones forzadas, torturas y violencia sexual contra civiles y combatientes en Ucrania

 ONU

El ataque armado de Rusia contra Ucrania sigue teniendo un “impacto devastador” en la población, según la Misión de Observación de los Derechos Humanos de la ONU en Ucrania que, en su último informe denuncia, una amplia gama de violaciones tanto a civiles como a combatientes, incluyendo asesinatos, detenciones arbitrarias y desapariciones forzadas, torturas y malos tratos, y violencia sexual.


Desde el 24 de febrero hasta el 25 de septiembre, la Misión ha registrado 5996 muertes de civiles y 8848 heridos, entre ellos 382 niños muertos. Las cifras reales son mucho más elevadas. El 90% de las víctimas civiles se registraron en zonas bajo control del Gobierno ucraniano y el 10% en partes de las regiones de Luhansk y Donetsk controladas por las fuerzas armadas rusas.


Según el informe, las desapariciones forzadas y la detención arbitraria “fueron generalizadas” en el territorio controlado por las fuerzas armadas rusas o grupos armados afiliados, con 407 casos.


El informe documenta casos de tortura y malos tratos a detenidos civiles por parte de las fuerzas armadas rusas. De los 38 civiles liberados (34 hombres y 4 mujeres) y entrevistados por la Misión, 33 declararon haber sufrido tortura y malos tratos. El informe también registró 34 denuncias de tortura o malos tratos presuntamente perpetradas por las fuerzas del orden de Ucrania.


Rusia no concedió acceso confidencial a ningún lugar de internamiento de prisioneros de guerra. Sin embargo, la Misión descubrió que, los “malos tratos a los prisioneros de guerra ucranianos parecen ser sistemáticos, no sólo en el momento de su captura, sino también tras su traslado a lugares de internamiento tanto en el territorio de Ucrania ocupado por la Federación Rusa como en la propia Federación Rusa”.


“Se trata de una grave violación del derecho internacional humanitario y la Federación Rusa debe hacer frente a ello", dijo la Misión.


Los expertos también descubrieron que algunos prisioneros de guerra rusos fueron sometidos a torturas y malos tratos por parte de miembros de las fuerzas armadas ucranianas, sobre todo durante su captura o mientras estaban en tránsito.