Economistas alemanes, sobre coyuntura: "Nos espera un invierno duro"

Por Michael Donhauser (dpa)

Núremberg (Alemania), 27 ago (dpa) - Las empresas y los consumidores de Alemania se enfrentan a tiempos difíciles, según declararon expertos de los principales institutos económicos del país en un sondeo realizado por dpa.

"En vista de las numerosas incertidumbres, creo que nos espera un invierno duro", señaló Veronika Grimm, miembro del Consejo de Expertos Económicos del Gobierno alemán, conocido como los Cinco Sabios.

Katharina Utermöhl, de la aseguradora Allianz, describió la situación de forma aún más drástica: "Partimos firmemente de la base de que habrá una recesión".

La economista jefe del banco estatal KfW, Fritzi Köhler-Geib, también ve oscuros nubarrones en el horizonte: "La economía alemana se enturbiará en los próximos tiempos".

Utermöhl añadió que la mayor economía de Europa se enfrenta a un reajuste fundamental, por encima de los retos a los tuvo que hacer frente en crisis anteriores.

La economista explicó que esto también se reflejará en las quiebras: "Habrá algunas empresas que sencillamente ya no podrán continuar".

Agregó que el principal problema son los altos precios, sobre todo de la energía. Utermöhl comentó que, con una expectativa de inflación de hasta el diez por ciento y precios galopantes del gas y la electricidad, los consumidores se ven obligados a ahorrar y a aplazar adquisiciones.

"El reciente y fuerte aumento de la tendencia al ahorro muestra la magnitud de la preocupación de los consumidores. La inminente pérdida de poder adquisitivo real -causada principalmente por los altos precios de la energía- será con probabilidad el viento en contra más fuerte", dijo Marc Schattenberg, experto del instituto de investigación Deutsche Bank Research.

Christoph Siebecke, del Banco Regional de Oldenburgo, en el norte de Alemania, ve la situación algo más favorable y no espera una recesión grave.

"Lo que ayuda es que las cadenas de suministro ya no tienen tantos problemas como los que observamos antes. También el precio del crudo está un poco alejado del que hemos tenido", señaló.

"La economía alemana es muy competitiva y adaptable. Le fue mejor de lo esperado en la primera mitad del año. En la segunda mitad, sin embargo, todo será más difícil", aclaró.

Schattenberg alertó: "Los elevados precios de la energía están presionando tanto a la industria como al sector de los servicios. Como resultado, es probable que la carga sobre la economía sea aún más severa".

Köhler-Geib, del banco estatal KfW, pidió una estrategia nacional para asegurar la mano de obra cualificada, ya que las carteras de pedidos de muchas empresas siguen llenas.

Por su parte, Grimm afirmó: "Hay una enorme demanda de trabajadores cualificados en muchos sectores. La cuestión es si se está dispuesto a ajustar los salarios. Eso, a su vez, impulsaría la inflación".

La experta añadió que la inflación subirá de todos modos debido al aumento de los precios como consecuencia de la supresión del billete reducido del transporte público, que vence el miércoles, y del descuento en el precio del combustible.

Al igual que Köhler-Geib y Utermöhl, Grimm mencionó los riesgos provenientes del exterior, entre ellos los problemas que aún persisten en las cadenas de suministro o la sequía en algunas regiones del mundo, que también presionan la coyuntura en Alemania.

"La economía mundial también se está enfriando", observó Utermöhl.