Audi anuncia llegada a la F1 en 2026: "Un momento muy especial"

Spa-Francorchamps (Bélgica), 26 ago (dpa) - La automotriz alemana Audi, filial del Grupo Volkswagen, anunció hoy su llegada a la Fórmula 1 a partir del año 2026, coincidiendo con la nueva normativa sobre el uso de combustibles sostenibles en motores híbridos.


"Estoy muy contento de estar aquí en este momento realmente muy especial", dijo el presidente ejecutivo de Audi, Markus Duesmann, durante una conferencia de prensa previa al Gran Premio de Spa-Francorchamps (Bélgica) de este fin de semana.


"Estaremos corriendo en la Fórmula 1 en 2026", añadió.


El fabricante de automóviles gastará cientos de millones de euros en su participación en la máxima categoría del automovilismo. Por tanto, explicó Duesmann, el proyecto es "a muy largo plazo".


Audi quiere desarrollar su propio motor, pero no crear una escudería completamente nueva. El futuro socio se hará oficial a finales de año. Se espera que Audi se una a la escudería suiza Sauber, que actualmente compite como Alfa Romeo.


"La decisión sobre el equipo con el que se competirá en 2026 será comunicada por Audi a finales de año", dijo la compañía en un comunicado de prensa.


Debido a un nuevo ajuste a la baja en el límite presupuestario que entrará en vigor en 2023 (135 millones de dólares anuales por escudería), la Fórmula 1 ha hecho posible que marcas como Audi se incorporen a ella, al hacerla más previsible financieramente.


Además, lo que es más importante, a partir de 2026 los motores híbridos de los monoplazas deberán correr con un combustible totalmente sostenible, lo que coincide con la dirección que quiere tomar la industria automotriz.


"Con la nueva normativa, ahora es exactamente el momento adecuado para incorporarnos. Porque tanto la Fórmula 1 como Audi persiguen objetivos claros de sostenibilidad", explicó Duesmann.


Por su parte, el actual presidente de la F1, el italiano Stefano Domenicali, se mostró entusiasmado en la rueda de prensa del anuncio. "Es un gran día", declaró. También su par de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), Mohammed bin Sulayem, quien habló de "un hito".


Porsche, otra marca de Volkswagen, podría anunciar también en breve su entrada en la Fórmula 1 en alianza con el equipo Red Bull del vigente campeón del mundo, Max Verstappen.


Esta doble entrada, combinada con los elevados costes, es un claro motivo de controversia dentro del Grupo Volkswagen. Sin embargo, Duesmann comentó que tanto él como el máximo responsable de Porsche, Oliver Blume, comparten su entusiasmo por las carreras.


En relación a la inversión necesaria, Duesmann dijo: "Ganar dinero siempre es bueno, pero no (siempre) hay que hacerlo".


Por su parte, el actual presidente del grupo, Herbert Diess, que será sustituido por Blume a principios de septiembre, comentó: "Nos han garantizado que recibiremos más dinero en Wolfsburgo (sede de la compañía) con la Fórmula 1 que sin ella".


Ya a principios de abril, el consejo de administración y el consejo de supervisión de VW habían dado luz verde para que Audi y también Porsche planificaran "una posible entrada en la Fórmula 1".


Sin embargo, Audi no espera lograr éxitos a corto plazo. Las victorias o incluso la lucha por el título de campeón del mundo en el primer año después de la entrada "no son realistas", manifestó Duesmann.


"Dentro de tres años deberíamos ser muy competitivos", añadió el directivo de 53 años.


El director de tecnología de Audi, Oliver Hoffmann, explicó que desarrollar un motor potente de Fórmula 1 en menos de cuatro años es un reto de enormes proporciones, "No es un plazo largo, tenemos que darnos prisa", dijo.


En la fábrica de automoción situada en la localidad de Neuburg an der Donau aún faltan personal y bancos de pruebas, y hay que pagar una fuerte inversión inicial. "No damos cifras de toda la operación, pero son cifras elevadas", concedió Duesmann.


El jefe de Audi sabe de lo que habla, ya que fue jefe de desarrollo de BMW a principios de los años 2000, también en colaboración Sauber. Cuando los éxitos esperados no se materializaron a pesar de las inmensas inversiones, BMW se retiró en 2009 después de solo cuatro años de competición.


El proyecto fallido de Toyota, de mil millones de euros, también debería servir de advertencia a otros fabricantes.