200 ingenieros relacionan las aguas residuales con el deterioro del Mar Menor

 EFE

El colectivo de Ingenieros Agrónomos del Campo de Cartagena ha aportado análisis concluyentes del aporte de fósforo, amonio, materia orgánica y otros contaminantes al Mar Menor a través de la rambla del Albujón, imprescindibles para la mortalidad de peces.


Más de 200 ingenieros agrónomos e ingenieros técnicos agrícolas del Campo de Cartagena han celebrado varias reuniones en Torre Pacheco para aunar esfuerzos en la recuperación definitiva del estado ambiental del Mar Menor.


En las reuniones celebradas se han presentado nuevos datos sobre el rol que juegan las aguas residuales en esta lamentable situación. Para ello, han analizado los efluentes vertidos por diferentes depuradoras y los datos extraídos confirman el aporte al Mar Menor de fósforo, amonio (nitrógeno), materia orgánica y otros contaminantes.


Señalan que esto es solo lo que se ve, pero aseguran que se producen entradas de aguas residuales por otras dos vías: mal estado de la red de saneamiento, una red donde sólo se ha reparado el 1% del total de los 1.200 km de tuberías existentes, así como la presencia masiva de núcleos urbanos y urbanizaciones con pozos ciegos. Un hecho que ha constatado el informe de alegaciones presentado por el IEO al Análisis de soluciones para el objetivo de vertido cero al Mar Menor proveniente del Campo de Cartagena y en diferentes informes de seguimiento del estado ecológico del Mar Menor publicados en el canal Mar Menor.


Las Tablas 1 y 2, que se muestran a continuación, muestran los valores de nutrientes y otros contaminantes que han sido vertidos por la EDAR Torre Pacheco a través de su aliviadero y en la desembocadura de la Rambla del Albujón.


Tabla 1. Niveles de nutrientes y contaminantes vertidos por la EDAR Torre Pacheco y en la desembocadura de la rambla del Albujón después de una lluvia moderada de 15 mm/día. El análisis se corresponde con el día 17 de marzo de 2022 con un volumen de agua aforado en la toma de la muestra de 982 L/s.


Los valores detectados en el aliviadero de la depuradora muestran niveles característicos de un vertido de aguas residuales sin depurar y diluidas por el agua de lluvia que llega a la estación de depuración a través de la red de saneamiento.


En el momento que se producen lluvias, la EDAR Torre Pacheco, que es de la que se dispone de datos, vierte a la rambla, modificando la composición del efluente. Atendiendo al factor dilución del agua de lluvia que actúa de diluyente de los contaminantes, a más lluvia más diluidos, el agua superficial se carga de amonio, fósforo y materia orgánica, elementos estos claves en el crecimiento de fitoplancton en la columna de agua del Mar Menor.


Las aguas residuales son el único sustrato que contiene todos los elementos imprescindibles para el crecimiento de fitoplancton en el Mar Menor (nitrógeno, fósforo, materia orgánica y otros elementos), indispensable para los episodios de mortandad producidos en el pasado y previsibles en el futuro.


La tabla demuestra que son las aguas residuales, y no el acuífero cuaternario, donde encontramos los nutrientes para que se produzca crecimiento de fitoplancton en la columna de agua del Mar Menor.


Tabla 2. Relación entre el origen del agua, contenido en nutrientes y crecimiento de fitoplancton en la columna de agua del Mar Menor.


Todos estos datos, que forman parte de un paquete mucho más extenso, han sido tomados durante los episodios de lluvias de los meses de marzo y abril de este año 2022.


El colectivo se compromete a actuar como palanca y ser proactivos en la búsqueda de soluciones. Además, han puesto de manifiesto el enorme intrusismo que sufre el sector por parte del resto de disciplinas no relacionadas con la agricultura; lo que provoca en muchos casos que se cometan asociaciones de ideas erróneas que pueden confundir a la sociedad, y, sobre todo, no aportan nada en la solución del Mar Menor.


Los Ingenieros Agrónomos e Ingenieros Técnicos Agrícolas del Campo de Cartagena insisten en que el Mar Menor requiere de la participación de todos. Por ello, ruegan cooperación y no competencia. Además, piden no frivolizar sobre el día y la hora de la nueva mortandad de los peces, alertado en los últimos días por las Administraciones con competencias en el Mar Menor, sino apostar por implementar soluciones reales y eficaces cuanto antes.


Después de 6 años, el colectivo está cansado de la búsqueda de culpas y culpables, sin aportar soluciones. La situación ha llegado a un punto de inflexión: es imposible solucionar un problema ambiental si no se ponen sobre la mesa todos los factores que afectan de forma relevante.