La Fundación Prusiana alemana pone en suspenso los proyectos con Rusia

Berlín, 26 feb (dpa) - La Fundación del Patrimonio Cultural Prusiano, una de las principales instituciones culturales de Alemania, tiene estrechos vínculos con Rusia pero decidió dejar todo en suspenso tras el ataque a Ucrania.


El conflicto tiene un impacto directo en las relaciones culturales entre Rusia y Alemania. La Fundación, que cuenta con el apoyo del Gobierno alemán y de los estados federados, tomó medidas de inmediato. Se trata de una de las instituciones culturales alemanas más importantes a nivel internacional con sus numerosos museos, colecciones e institutos.


"Por muy buena que haya sido nuestra cooperación, ahora no podemos seguir como si nada en vista de lo que está ocurriendo en Ucrania", declaró el presidente de la Fundación, Hermann Parzinger, a dpa en Berlín. "De momento hemos dejado nuestros proyectos y planes para el futuro en suspenso", subrayó. 


Existen estrechas relaciones culturales a través del foro Diálogo de Petersburgo o el Diálogo de Museos Germano-Ruso. 


Investigadores de ambas partes colaboran estrechamente en el tema del arte saqueado, por ejemplo, los bienes culturales encontrados en Rusia tras la Segunda Guerra Mundial. La Fundación Prusia y el mismo Parzinger, experto en Rusia, se consideran figuras centrales en este proceso.


"Alemanes y rusos están unidos de forma especial por la trágica historia del siglo XX", dijo Parzinger. "Por la destrucción alemana en tiempos de guerra, Rusia declaró mediante la Ley de la Duma de 1998 que los bienes culturales alemanes transferidos a Rusia en 1945 son propiedad rusa. Desde los años 90, trabajamos juntos sobre esos bienes y en una cooperación de gran confianza", declaró.


Parzinger se refirió a las exposiciones conjuntas, por ejemplo, y muchos objetos volvieron a formar parte del ciclo de investigación internacional.


"Aunque Alemania y Rusia tienen posturas legales diferentes sobre el arte saqueado, hemos convertido lo que nos dividía en algo que nos une. Los museos alemanes y rusos trabajan tan bien juntos hoy en día que no quieren estar el uno sin el otro".


Parzinger advirtió que el ataque ruso puede significar una amenaza para las instituciones culturales de Ucrania. "Los peligros para los bienes culturales en Ucrania son muy altos. Sabemos que los atacantes no los tienen en consideración", declaró el jefe de la fundación. 


"El museo de Donezk fue atacado con misiles en los ataques de los separatistas en el este de Ucrania en 2014 y un 30 por ciento quedó destruido", recordó. 


Parzinger dijo que era de esperar que monumentos y edificios históricos resulten dañados por ataques con misiles y bombas y por los combates. "Además, en casi todas las ciudades ucranianas atacadas hay importantes museos con colecciones significativas", precisó.


El director de la Fundación Prusia dijo que están llegando señales contradictorias desde Rusia. "Putin no es Rusia", dijo. 


"Por supuesto allí hay los denominados patriotas en los que hace efecto la propaganda del Kremlin", señaló, pero aclaró que, sin embargo, mucha gente en Rusia critica la invasión a Ucrania. 


"Una carta abierta de protesta que circula por Internet ya ha sido firmada por cientos de científicos y académicos rusos, un comportamiento inmensamente valiente. Porque todo el mundo sabe que no se tolera la disidencia", declaró Parzinger.