Corte Suprema de Inglaterra favorece a Juan Guaidó en caso del oro venezolano

VOA

La Corte Suprema del Reino Unido falló este lunes a favor del reconocimiento de Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela y la junta directiva ad hoc del Banco Central afín a su gestión en la diatriba judicial iniciada en 2020 sobre la administración de 1.950 millones de dólares en oro de su nación reservados en las bóvedas de bancos en Inglaterra.

Cinco jueces de la Corte Suprema inglesa sentenciaron unánimemente que los tribunales de su jurisdicción deben “aceptar” los pronunciamientos del poder ejecutivo inglés, es decir, de su cancillería, en cuanto a la duda de quién es el jefe de Estado de Venezuela, si el líder opositor Juan Guaidó o Nicolás Maduro.

“El señor Guaidó es reconocido por el Gobierno de Su Majestad como el presidente interino constitucional de Venezuela y el señor Maduro no es reconocido por el Gobierno de Su Majestad como presidente de Venezuela para ningún propósito”, opinó la Corte en el caso de apelación 2020/0195.

En julio de este año, el Asesor Jurídico de la Cancillería británica presentó sus argumentos en nombre del Secretario de Asuntos Exteriores en la audiencia del caso sobre los derechos de acceso al oro propiedad del Estado de Venezuela.

Según los magistrados, ese pronunciamiento fue “un reconocimiento claro e inequívoco del señor Guaidó como presidente de Venezuela, lo que necesariamente implicaba que el señor Maduro no fuera reconocido” como tal.

La oposición venezolana afirma que Maduro usurpa la presidencia de su país desde el 10 de enero de 2019 al reelegirse, un año antes, en unas votaciones consideradas fraudulentas. Guaidó, entonces presidente de la Asamblea Nacional, asumió como mandatario interino del país.

La corte menciona en su fallo que tanto Guaidó como Maduro designaron sendas juntas directivas del Banco Central de Venezuela, que “han emitido instrucciones contradictorias concernientes a cerca de 1.000 millones de dólares de las reservas internacionales de Venezuela, reservadas en las bóvedas del Banco de Inglaterra, y una suma similar reservada en el Banco Deutsche”.

Según el expediente, que recuerda el origen político de la diatriba, se trata de 1.950 millones de dólares reservados en dos bancos con sede en Inglaterra.
Sin cuestionamientos

Los cinco magistrados ingleses que abordaron el caso recuerdan que existen reglas de leyes domésticas que impiden a los tribunales ingleses cuestionar o rebatir los juzgamientos de actos ejecutivos de un Estado foráneo que haya sido realizado dentro del territorio de esa nación -en este caso, Venezuela-.

Esa regla obliga a los tribunales ingleses a no cuestionar la legalidad o validez de los decretos emitidos por Guaidó en cuanto a la junta directiva ad hoc del BCV afín a su presidencia interina y la designación de un Fiscal General Especial.

Los jueces, sin embargo, apuntaron que la Corte de Comercio de Inglaterra es quien debe determinar si las sentencias del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, cuyos magistrados suelen dictar fallos favorables a Maduro y que refrendan a su BCV, “deben ser reconocidas” por la nación europea.

El año pasado, la junta administrativa del Banco Central afín a Maduro logró apelar exitosamente una decisión previa que favorecía a Guaidó. El fallo del lunes nace de una apelación de la junta ad hoc designada por el líder opositor.

Guaidó celebró este lunes la sentencia de la Corte Suprema de Inglaterra, ratificando que el oro continuaría “protegido” en el Banco de esa nación.

“La dictadura no podrá saquearlo como hizo con los fondos públicos que generó esta emergencia humanitaria”, escribió en su cuenta oficial de Twitter.

Isadora Zubillaga, subcomisionada para relaciones exteriores del despacho de Guaidó, valoró el fallo como “una gran victoria para Venezuela”. “El oro está a salvo, fuera del alcance de Maduro”, escribió la funcionaria en Twitter.

El gobierno de Maduro, que mantiene aún el control territorial y ejerce de facto la autoridad ejecutiva en Venezuela, no se ha pronunciado sobre el fallo. En el pasado, el mandatario y sus voceros principales han acusado a la oposición venezolana de “robarse” los activos del país en el extranjero.