Baerbock, la ecologista que aspira a llegar al poder en Alemania

Por Klaus Blume (dpa)

Berlín (dpa) - De joven, Annalena Baerbock era atleta de competición. Desde entonces, su disciplina favorita es el trampolín.

La copresidente de Los Verdes se propone ahora dar el gran salto, ya que como candidata del partido ecologista a la Cancillería aspira a llegar al poder en Alemania. Y no carece de posibilidades. 

Es la primera vez en sus más de 40 años de historia que Los Verdes presentan una candidatura propia en las elecciones generales de Alemania.

Los Verdes son la agrupación más pequeña en la Cámara Baja del Parlamento alemán (Bundestag) elegido en 2017, pero en las encuestas han crecido con fuerza desde que Baerbock y Robert Habeck asumieron en 2018 el liderazgo conjunto del partido. 

En la política alemana, la llegada de Baerbock a la Cancillería representaría tanto un giro hacia una política ecológica de izquierdas como una renovación generacional. 

La dirigente nació en Baja Sajonia en 1980, el año de la creación de su partido. Es 26 años más joven que la saliente canciller federal alemana, Angela Merkel. En el caso de un triunfo electoral, Baerbock se convertiría, por mucho, en la jefa de Gobierno más joven de la historia de Alemania. 

Baerbock creció en un pueblo al sur de Hannover, en una especie de comunidad hippie y desde pequeña fue llevada a manifestaciones antinucleares y pacifistas. 

Luego de graduarse como bachiller, estudió ciencias políticas y derecho en Hamburgo y Londres. Entre 2009 y 2013 cursó el doctorado en derecho público internacional en la Universidad Libre de Berlín, pero no llegó a recibir el título. 

Madre de dos hijas, desde hace varios años vive en el estado federado de Brandeburgo, en la región oriental de Alemania. Allí fue presidenta regional de Los Verdes entre 2009 y 2013, año en el que fue elegida para una banca en el Bundestag por el distrito de Postdam. Hasta ahora no ha ostentado ningún cargo gubernamental.  

Baerbock se impuso en la primavera europea en la carrera por la Cancillería federal con Habeck, quien insinuó que, además de sus muchas cualidades, la "baza femenina" podría haber jugado un papel.

Tras la presentación de Baerbock el 19 abril, Los Verdes experimentaron un auge y durante un corto tiempo se convirtieron en el partido más fuerte de Alemania en las encuestas. Pero la euforia duró poco y pronto se derrumbaron los índices de popularidad. 

Baerbock también protagonizó titulares negativos, por ejemplo cuando informó con demora al Parlamento unos pagos especiales que recibió de su partido.

Luego, salieron a la luz varias inconsistencias en el currículum vitae oficial, por ejemplo en relación con sus títulos académicos, pertenencia a clubes y organizaciones o una supuesta actividad en Bruselas, que la candidata tuvo que corregir posteriormente.

Poco después se supo que en el libro de Baerbock "Jetzt. Wie wir unser Land erneuern" (Ahora. Cómo estamos renovando nuestro país") se copiaron algunos pasajes de otras obras sin citar las fuentes de forma apropiada.

La candidata también mostró lagunas de conocimiento acerca de la historia alemana cuando convirtió a los socialdemócratas en los inventores de la "economía social de mercado" tan valorada en Alemania, cuando en realidad fueron los demócratas cristianos.

Otra vez, ubicó erróneamente algunos lugares en el mapa de Brandeburgo, su hogar adoptivo. 

Todos estos traspiés llevaron al semanario "Der Spiegel" a hablar de la "ruina de una candidatura", mientras que el escritor Hans Christoph Buch, quien se ha declarado un frecuente votante de Los Verdes, reclamó en declaraciones al periódico "Die Welt" que Baerbock fuera reemplazada por Habeck.

Pero la dirigencia del partido no quiere saber nada de eso. Habeck calificó estas declaraciones de "tonterías". 

En el plano político, Baerbock impulsa que se acelere el fin de la generación de energía a base de carbón, se aumente la cuota de las energías renovables y se promueva una "política activa de inmigración".

Con la asunción como presidenta del partido, la dirigente también quiso demostrar que "las chicas de hoy pueden llegar a ser cualquier cosa", según afirma en su biografía oficial.

En ella también vuelve a su época en el trampolín. "Lo que he interiorizado a través del deporte es el valor de superarse siempre, de atreverse a hacer algo nuevo".