Farias: La animación iberoamericana ha alcanzado cotas de calidad increíbles


 EFE

Santa Cruz de Tenerife, 25 may (EFE).- El director de los Premios Quirino, Jose Luis Farias, ha destacado la “riqueza” y la “heterogeneidad” de la animación iberoamericana, que no solo ha alcanzado “unas cotas de calidad increíbles”, sino que toma mayores riesgos en cuanto a historias y técnicas animadas.

Este sábado, 29 de mayo, tendrá lugar la ceremonia de entrega de premios de la cuarta edición de los Premios Quirino. Unos galardones que parten “de una necesidad del sector”, y que han dejado de ser un evento para convertirse en una plataforma activa “que teje redes, promociona talentos y analiza los desafíos del sector” los 365 días del año, asevera Farias, en una entrevista a Efe.

Para el director español, iniciativas como el Libro Blanco de la animación iberoamericana, el informe de resiliencia del sector y las reuniones que catalizan entre Ibermedia y las asociaciones iberoamericanas de animación “son solo un ejemplo de lo que hemos hecho y seguimos haciendo”.

A juicio de Farias, la situación de la industria iberoamericana es muy “prometedora”, pues está empezando a consolidarse no solo en las pantallas habituales (cine y televisión), sino en todos los formatos, como las aplicaciones móviles, los videojuegos y la cartelería digital.

“En muy poco tiempo y gracias a una comunidad muy implicada que nos apoya cada vez más, nos hemos convertido en el punto de encuentro de la animación iberoamericana y del sector con las instituciones que toman decisiones”, abunda.

En este sentido, Farias asegura que uno de los grandes hitos del sector ha sido visibilizar que la animación no solo es “rentable”, sino que constituye un negocio “muy sólido” y una “importante” apuesta de futuro.

En relación a los desafíos a los que se enfrenta el sector, el director de los Quirino mantiene que el factor limitante de la industria iberoamericana no es la creación de contenidos, pues “hay muchísimo talento, grandes ideas y técnicamente se está a un nivel muy bueno”, sino la distribución y la financiación de dichos proyectos.

“Son las dos cuestiones que más nos preocupan y donde más tiene que mejorar el sector de la animación iberoamericana”, reconoce.

Para el director del festival mexicano de animación Pixelatl, José Iñesta, sin embargo, el principal desafío del sector continúa siendo la colaboración, un reto que no solo tiene la industria de la animación, sino el ser humano, que debe “aprender a trabajar en equipo, a ceder y a tener apertura hacia otras formas de narrar y producir”, precisa a Efe.

Para Iñesta la animación se relaciona con la audiencia “de formas que el cine de acción viva no puede”, por este motivo, considera fundamental que sus contenidos cuenten con personajes diversos, en donde se den cabida y convivan “todos los géneros, discapacidades, creencias religiosas y colores de piel”.

A pesar de lo anterior, ambos ponen en valor la “resiliencia” de la animación iberoamericana, que ha salido reforzada de la pandemia. De hecho países como España, México, Paraguay, Portugal, Argentina y Chile han mantenido su ritmo de producción prácticamente al cien por cien a pesar de la crisis.

Recogiendo el testigo de la coproducción, el director de contenidos infantiles en Radio Televisión Española (RTVE), Yago Fandiño, recuerda, “aunque suene un poco manido”, que España constituye un puente entre Iberoamérica y Europa.

“Y los Quirino son una buena muestra de cómo España puede ayudar a poner en contacto esas dos culturas de producción audiovisual y facilitar las coproducciones”, declara.

Fandiño insiste, además, en la importancia de que la animación iberoamericana se mantenga unida si desea conquistar ese “prometedor” futuro que tantos auguran, pues “el mundo es muy cruel con los pequeños”, advierte.

“La única forma de mantener nuestra cultura y poder ofertarla es uniéndonos y colaborando. El potencial de Iberoamérica es conocernos, encontrar las cosas comunes y lo que nos diferencia, porque eso aporta riqueza”, sentencia.

De cara al futuro, Jose Luis Farias adelanta que durante los Quirino, el Programa Ibermedia ha recogido la opinión de instituciones y profesionales para analizar nuevas posibles líneas de ayudas para la creación digital.

En línea con lo anterior, el coordinador defiende que los Quirino se han posicionado porque “todo el mundo es consciente de que son una apuesta para el bien común”.

Una iniciativa “integradora” que estructura el sector de la animación iberoamericana y que está consiguiendo que cada vez se interlocute más entre administraciones, empresas y colectivos “para poder mejorar juntos el sector”.

En lo que respecta a las obras finalistas, los tres entrevistados coinciden en la “calidad” y el “equilibrio” de los proyectos presentados, que no solo son “más sorprendentes” cada año, sino que reflejan la “sensibilidad” y el “criterio” que ha desarrollado la animación iberoamericana en estos últimos años a la hora de seleccionar las técnicas para contar una historia.

“Para mí estos premios son una ilusión y espero que nos sobrevivan a todos los que hemos iniciado esta trayectoria”, recalca Farias.

Los tres entrevistados coinciden, además, en que la animación es una herramienta de “transformación”, una técnica que no solo llega a todos los géneros, sino que permite contar historias, que de otra forma, resultarían imposibles.

"Nos encontramos, por tanto, ante el medio que más fácil viaja entre países, territorios y generaciones, y por eso deberíamos usarla para construir la humanidad del futuro”, sentencia José Iñesta. EFE