Presidente alemán recuerda gesto de perdón de Willy Brandt en 1970


Berlín, 7 dic (dpa) - El presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, destacó la importancia de las relaciones germano-polacas, con motivo de recordarse hoy el 50 aniversario del histórico gesto del ex canciller alemán Willy Brandt al arrodillarse ante el monumento conmemorativo del levantamiento del gueto de Varsovia, en un pedido de perdón simbólico por los crímenes del nazismo en Polonia.

"La cooperación entre Alemania y Polonia es un importante requisito para un futuro exitoso", dijo Steinmeier en un mensaje de vídeo sobre el aniversario.

"Pero tampoco olvidaremos el pasado: ni el sufrimiento del pueblo de Polonia, ni el valor histórico para (alcanzar) la reconciliación, ni tampoco un arrodillamiento que nos recuerda todo eso", añadió.

Steinmeier expresó asimismo su beneplácito acerca de la decisión del Bundestag (Parlamento alemán) de erigir un monumento en memoria de las víctimas polacas de la Segunda Guerra Mundial en un lugar prominente de Berlín.

"Ese monumento representa un signo visible contra el olvido. Al mismo tiempo, debería ser para nosotros una permanente advertencia en pos de un futuro mejor", señaló. A finales de octubre, el Bundestag solicitó al Gobierno federal la creación de un monumento al respecto.

El 7 de diciembre de 1970, inmediatamente antes de la firma del Tratado de Varsovia, en el que Alemania Occidental reconoció la frontera polaca de posguerra, Brandt depositó una corona en el monumento a los héroes del gueto judío de Varsovia.

Después de acomodar las cintas de la corona, el político socialdemócrata se arrodilló, gesto que recibió la atención mundial por ser interpretado como una petición de perdón por los crímenes de la era nazi y como una señal de reconciliación.

Hoy será el jefe de la Oficina de la Presidencia, el secretario de Estado Stephan Steinlein, quien depositará una corona en el monumento en Varsovia que recuerda a las víctimas del levantamiento del gueto judío en 1943.

Por su parte, el vicecanciller alemán, Olaf Scholz, recordó el arrodillamiento de Brandt como un "gesto profundamente humano" y elogió la política de distensión del ex canciller germano hacia la Unión Soviética, la extinta República Democrática Alemana (RDA) y los demás estados del Pacto de Varsovia "como un gran cambio liberador para Alemania y para Europa".