Instituto económico recrimina a Gobierno alemán insuficiente ayuda

Berlín, 26 jul (dpa) - El renombrado Instituto de Economía Mundial (IfW) de Kiel recriminó al Gobierno alemán no proporcionar suficiente ayuda a las empresas en la crisis derivada de la pandemia de coronavirus.

"La política se ha enredado en detalles. El programa de estímulo económico tiene 57 posiciones. Desde el punto de vista de una política de estabilización, no es apropiado porque no actúa justamente donde las empresas tienen los mayores problemas", dijo a dpa Stefan Kooths, director del centro de previsiones del instituto.

Kooth cree que la respuesta más adecuada sería una ayuda dirigida al capital propio de las empresas en forma de subvenciones. "Cada mes sin suficiente facturación reduce el patrimonio de las empresas", explicó, a la vez que añadió que hay grandes diferencias en las necesidades entre las empresas y los sectores.

El experto citó como ejemplo que el sector de la construcción no se ve muy afectado por la crisis, mientras que el sector gastronómico o las empresas de montaje de stands de ferias comerciales se ven fuertemente golpeados por la misma, y que en la industria manufacturera algunas empresas no se ven afectadas en absoluto y otras enormemente.

"No debería darse que un sector determinado tenga que soportar los costes de acuerdo con un impacto accidental", reclamó Kooths. "Más bien, debería haber un reparto de la carga", consideró y acotó que también partes del negocio de exportaciones cayeron drásticamente.

Kooths criticó que el Gobierno haya decidido incentivar el consumo masivo, como lo muestra la reducción del impuesto sobre el valor agregado (IVA), dado que de hecho hay poder adquisitivo, acumulado a causa de las restricciones por la pandemia, como los cierres de comercios.

"El ahorro adicional derivado de la pandemia de coronavirus es de unos 130.000 millones de euros (151.502 millones de dólares) este año", estimó, y cifró que esa es la cantidad del gasto de consumo habitual, "que no pudo tener lugar debido a las restricciones impuestas para evitar los contactos".

El directivo del IfW calificó de error el hecho de que la obligación de informar de las insolvencias haya sido suspendida hasta septiembre. Kooths apuntó que las cifras de insolvencias se encuentran todavía en un nivel muy bajo, porque las empresas estaban en buen estado cuando estalló la crisis.

"Pero con cada mes que pasa, la estabilidad se desvanece", sostuvo, y advirtió que falta ahora el indicador de las consecuencias y un posible alivio de la crisis, "por lo que es de temer una ola de insolvencias a partir de octubre".

Con respecto a la preocupación en la población acerca de si el Estado puede permitirse los costosos programas de rescate, Kooths dijo: "En términos puramente fiscales, Alemania puede permitirse las medidas de estímulo este año y el próximo. Pero los fondos del Estado están siendo despilfarrados en parte y no están siendo utilizados con el máximo efecto de estabilidad".

El economista señaló asimismo que el Estado no debería agotar ahora los medios que puede permitirse, "porque probablemente no sea esta la última crisis con la que debamos lidiar". "Deberíamos seguir armándonos y mantener espacio para maniobrar. Recomiendo no llegar hasta el límite ahora", concluyó.