Estudio: Consumo en Alemania se recupera lentamente
"Al parecer, la tenue luz al final del túnel, que ya era evidente el mes pasado, está cobrando más brillo", señaló a dpa el experto en consumo de GfK, Rolf Bürkl.
GfK pronostica un valor de menos 9,6 puntos para julio, significativamente mejor que los 18,6 puntos negativos de junio, pero todavía situado como la tercera peor predicción registrada.
Parece que los consumidores están despertando paulatinamente de la crisis del coronavirus, que provocó una caída sin precedentes de la intención de compra desde abril.
"Pero aún no estamos fuera de peligro", remarcó Bürkl, quien cuestiona que el clima económico vuelva a su nivel anterior a la crisis.
"La propensión a consumir podría cambiar", dijo Bürkl, al tiempo que observó que mucha gente se está preguntando antes de hacer una compra: "¿Realmente necesito esto?".
El experto recordó que el riesgo de un rebrote del coronavirus sigue existiendo, como demuestran los casos registrados en plantas de procesamiento de carne de Renania del Norte-Westfalia o en los controvertidos torneos de tenis disputados en Croacia, hechos que causan incertidumbre.
"Alemania se encuentra en una grave recesión", enfatizó Bürkl, acotando que esta es una situación que podría producir insolvencias en el otoño boreal y un mayor aumento del desempleo.
"La pregunta es cuántos de los siete millones de trabajadores con jornada reducida se quedarán sin empleo", añadió Bürkl, quien señaló que el temor a perder el puesto de trabajo continuó presionando el clima de consumo, si bien los incentivos del Gobierno alemán han podido materializar alguna intención de compra.
Sin embargo, la confianza está de vuelta entre los alemanes en cuando al desarrollo de la coyuntura. El indicador GfK de expectativas económicas se sitúa actualmente en 8,5 puntos, un valor en franca mejoría, y también disminuyó el pesimismo en cuanto a los ingresos.
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