Continúan protestas antirracismo en fútbol alemán

Berlín 7 jun (dpa) - Jugadores y equipos alemanes continuaron protestando contra el racismo en los encuentros disputados este sábado mediante gestos, camisetas y mensajes antisegregacionistas.

Equipos rivales que posan juntos con gestos simbólicos antes del partido, jugadores que lucen camisetas con mensajes antirracistas y celebración de goles con arrodillamientos y mirada al suelo en señal de duelo: todo ello formó parte este sábado del fútbol alemán.

El gremio futbolístico germano demuestra así su protesta por la muerte del afroamericano George Floyd como resultado de un brutal operativo policial en Estados Unidos.

Los jugadores del Borussia Dortmund y del Hertha de Berlín se colocaron con la rodilla en el suelo alrededor del círculo del centro del campo antes de iniciar el partido y guardaron un minuto de silencio.

Además, los futbolistas del Dortmunt llevaron camisetas para el calentamiento con mensajes como: "Sin justicia no hay paz".

En el encuentro celebrado entre los equipos de tercera división Waldhof Mannheim y Viktoria Cologne se emitieron mensajes antirracistas por el sistema de megafonía antes de iniciar el partido.

Los jugadores del Bayern Múnich, líder de la Bundesliga, vistieron camisetas con la leyenda: "Roja -tarjeta- contra el racismo", antes de comenzar el partido contra el Bayer Leverkusen.

"Por supuesto que fue una iniciativa del equipo", dijo el entrenador del Bayern, Hansi Flick. Por su parte, el capitán del equipo muniqués confirmó el mensaje que quieren transmitir los jugadores: "somos tolerantes, somos cosmopolitas".

Otro futbolista, Pierre Kunde del Maguncia se arrodilló tras anotar ante el Eintracht Fráncfort, imitando el gesto de protesta contra el racismo protagonizado por el jugador de fútbol americano Colin Kaepernick en 2016.

La Comisión de Control de la Federación Alemana de Fútbol (DFB) decidió el miércoles en Fráncfort que no iniciará ningún procedimiento contra los goleadores Jadon Sancho y Achraf Hakimi del Borussia Dortmund, así como tampoco contra Weston McKennie del Schalke y Marcus Thuram del Borussia Mönchengladbach.

Los futbolistas profesionales habían protestado contra la muerte violenta de George Floyd a través de diversas acciones y gestos durante los partidos del fin de semana de Pentecostés.

Por principio, la Liga Alemana de Fútbol (DFL) y la DFB no permiten mensajes políticos en camisetas o durante los partidos. Las reglas de la DFB establecen, entre otras cosas, que los jugadores no pueden mostrar vestimenta con "lemas políticos, religiosos o personales".

El comité de la DFB mantendrá su línea en los próximos días de partido, aunque haya nuevas acciones antirracistas.

"Está claro que la Comisión de Control de la DFB siempre tiene en mente el reglamento de fútbol de la FIFA y el de la DFB. Sin embargo, en este caso concreto se trata de acciones antirracistas protagonizadas por los jugadores, que de este modo defienden valores que la DFB también defiende y defenderá", explicó Anton Nachreiner, presidente de la comisión.

"Por lo tanto, no se iniciará ningún procedimiento, ni siquiera en el caso de acciones similares contra el racismo en las próximas semanas", dijo.

Sancho, del Borussia Dortmund, se subió la camiseta reglamentaria por encima de la cabeza después de marcar el 2:0 en el partido contra Paderborn y mostró otra que llevaba debajo con la inscripción "Justicia para George Floyd". Su compañero de equipo Hakimi hizo lo mismo ya que él también llevaba una camiseta debajo de la oficial con la misma inscripción.

Thuram, del Borussia Mönchengladbach, apoyó su rodilla izquierda sobre el campo y miró al suelo después de su primer gol en el 4-1 contra Unión Berlín. "No es necesario dar explicaciones", tuiteó el Borussia.

Por su parte, McKennie, del Schalke, llevaba un brazalete con la inscripción "Justicia para George" durante el partido contra Bremen que finalizó en 0-1.

Numerosos clubs de fútbol y jugadores se sumaron a la protesta publicando mensajes antirracistas en los medios sociales durante la semana.