Alemania aboga por apertura de fronteras coordinada en Europa

Berlín, 7 may (dpa) - El jefe de la Cancillería alemana, Helge Braun, afirmó hoy que, en cuanto a la apertura de fronteras, Alemania debe estar atenta a lo que hacen los países vecinos.

"El inicio de estos controles de frontera fue debido a que, en Alemania, las tiendas estaban abiertas y en los países vecinos ya no, entonces se produjo mucho movimiento porque la gente cruzaba la frontera para venir a comprar", dijo hoy el político democristiano a la radio Deutschlandfunk.

Indicó que el "abarrotamiento de los centros de las ciudades" que esto tendría como consecuencia "no es lo que se necesita". Sin embargo, aclaró que los controles en las fronteras interiores europeas "deben estar siempre bien justificados y ser por un tiempo limitado".  

Braun advirtió asimismo acerca de flexibilizar demasiado cuestiones como los contactos sociales y los viajes. "Si se mira hacia atrás, se puede observar que justamente ahí es donde se encuentran los grandes riesgos de contagio", dijo.

Añadió que debido a la evolución positiva de la situación y al descenso de los contagios, Alemania puede "permitirse" ahora algunas cosas. "La población alemana se comportó de manera muy, muy ejemplar, por eso nos envidian toda Europa y partes del mundo", opinó el jefe de la Cancillería.

A su vez, subrayó que considera importante que los niños puedan volver a los jardines de infancia y a las escuelas "para asegurar las posibilidades de formación de las generaciones más jóvenes", apuntó.

El ministro alemán del Interior, Horst Seehofer, se coordinó antes de la última prolongación de los controles hasta el 15 de mayo con los primeros ministros de los estados federados alemanes que limitan con otros países. No trascendieron quejas por parte de los jefes de Gobierno.

Quienes no viven en Alemania pueden ingresar actualmente al país solo con un motivo bien fundado. Además, sigue rigiendo el principio según el cual todo aquel que viaje a Alemania desde el exterior debe hacer cuarentena durante dos semanas.

Mientras sea este el caso, incluso una modificación en la regulación de las fronteras podría tener un efecto más bien escaso.