Exinspector general de Seguridad Nacional de EE.UU. es acusado de robo de datos

VOA

Un gran jurado federal en el Distrito de Columbia ha expuesto una acusación contra el exfuncionario estadounidense Charles K. Edwards, de 59 años de edad, bajo el presunto delito de “robo de propiedad de software y bases de datos confidenciales del gobierno de Estados Unidos”.


Según informó este viernes el departamento de Justicia, Edwards actuó junto a otras personas “como parte de un plan para defraudar al gobierno”, y suma unos 16 cargos penales.

Edwards, residente en Sandy Spring, Maryland, fue Inspector General Interino del departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. (DHS por sus siglas en inglés) y habría cometido los delitos junto a su exsubordinado Murali Yamazula Venkata, de 54 años, de Aldie, Virginia.

El exfuncionario se enfrentaademás a los cargos de “fraude electrónico y robo de identidad agravado”. Otra acusación contra Venkata es la de “destrucción de registros”.

Según las acusaciones, de octubre de 2014 a abril de 2017, Edwards, Venkata y otros “ejecutaron un plan para defraudar al gobierno de Estados Unidos robando software confidencial de la Oficina del Inspector General (OIG) del DHS, junto con bases de datos sensibles del gobierno”.

Los datos adquiridos, asegura el departamento de Justicia, contienen información de identificación personal de los empleados del DHS y del servicio postal USPS, con la intención de que la compañía de Edwards, Delta Business Solutions, pudiera vender una versión mejorada del software de DHS-OIG a la Oficina del Inspector General para el Departamento de Agricultura de Estados.

Aunque Edwards había dejado Seguridad Nacional en diciembre de 2013, “continuó aprovechando su relación con Venkata y otros empleados de DHS-OIG para robar el software y las sensibles bases de datos del gobierno”.

Otros detalles dan cuenta de que Venkata lo ayudó a construir un servidor de prueba en su residencia con el software y las bases de datos robados.

Edwards “contrató a desarrolladores de software en India con el propósito de desarrollar su alternativa comercial al software DHS-OIG”.

El Departamento de Justicia de EE.UU. aclaró en su comunicado que una acusación formal “es simplemente una acusación y todos los acusados se presumen inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad más allá de una duda razonable en un tribunal de justicia”.